United States or Armenia ? Vote for the TOP Country of the Week !


Don Mariano forcejeaba por desasirse de los brazos de los soldados. Los curiosos, que habían retrocedido ante su empuje, viéndole sujeto y repuestos del susto, volvieron hechos basiliscos, arrojando espumarajos por la boca.

Poco después de la desaparición de Montiño, una litera llevada por dos ganapanes, y seguida á paso lento por un criado, se detuvo á poca distancia del alcázar, se abrió la portezuela y salió de una manera violenta una mujer. Era Dorotea. Hemos retrocedido algún tiempo. Al punto en que Dorotea, antes de encontrar á Quevedo, había ido al alcázar en busca del cocinero mayor.

Nosotros le llamábamos el sainetero, por ser hijo de D. Ramón de la Cruz. Adelante, pues al llegar a Menjíbar, encontramos la población muy alborotada porque un destacamento francés, enviado a Jaén en busca de víveres, después de saquear horriblemente esta ciudad, había retrocedido a su cuartel general, asolando a su paso la comarca.

Sabía el precio de lo que comía; podría indicar, céntimo por céntimo, el coste de su vida; creía haber retrocedido a aquella dura época de Milán, cuando con la partitura bajo el brazo, entraba en casa del especiero por los macarrones, la manteca o el café. ¡Cómo la divertía aquello!... Y no queriendo prolongar por más tiempo la expectación escandalizada de la gente que interpretaba sus sonrisas y su voluble charla del peor modo, dio su mano a Rafael despidiéndose.

Pero con esta estratagema, en vez de avanzar retroceden y acaban por desaparecer de escena. Las mujeres sueltan la carcajada. Creo, Escipión, que hay un defecto en tu plan. Queriendo avanzar, hemos retrocedido, que diría Sócrates. EL GRUESO ROMANO. ¡Yo no comprendo! PABLO EMILIO. Señores romanos, ¡seamos valerosos! ¿A qué nos exponemos? ¿A uno o dos arañazos?

Mandó antes de ponerla en práctica, juntar todos los vecinos que se quedaban, y animando sus espresiones cuanto pudo, les exhortó con viveza á que conservasen la mayor fidelidad á nuestro legítimo Soberano, y que se precaviesen de la sedicion y engaños del tirano: y dejando asegurada las pocas armas que tenia, para que no se apoderase de ellas el enemigo, marchó sin pérdida de tiempo hácia la Sierra, donde se mantuvo, hasta que adquirió noticia, de que despues de cometidos muchos estragos é infamias en la próvida de Lampa, y dejado secretamente la órden á sus propios provincianos, para que lo prendiesen y se lo entregasen, habia retrocedido inopinadamente hacia las provincias del vireinato de Lima, con las tropas que le seguian, reflexionando serian otros graves y semejantes motivos, los que retardaban el socorro que habia pedido á los corregidores de la Paz y Arequipa: y para restablecer en la debida obediencia las nueve provincias que habian abrazado el infame partido del rebelde, determinó pasar en persona á Arequipa, para acalorar las instancias, á fin de que se le auxiliase como lo habia pedido.

Pero acordándose de lo que debía a su esposa, de lo que se debía a mismo, de lo que debía a sus años, y de otra porción de deudas, y sobre todo, por fatalidad de su destino que nunca le había permitido llevar a término natural cierta clase de empresas, era lo cierto que había retrocedido en aquel camino de perdición desde el día en que una tentativa de seducción se le frustó, por fingido pudor de la criada. «No había, en suma, llegado a ser dueño de los encantos de su doncella, pero en aquellos primeros y últimos escarceos amorosos había podido adquirir la convicción de que la Regenta le había regalado a Petra unas ligas que el amante esposo le había regalado a ella».

No admito que una empresa comenzada se quede sin terminar, á menos que no se demuestre que es imposible. Pero usted no sólo no ha retrocedido sino que acepta todas las dificultades con la calma de un hombre resuelto. Su valor de usted es extraordinario. Marenval bajó la cabeza. No me coloque usted tan alto en su estimación. Debo confesarle que, en el fondo, he dudado más de una vez.

Como un delirante, profería, ahora, interjecciones soberbias, creyendo menear aún en la mano el acero mortífero; y la lucha, entre el resplandor de las antorchas y de los haces de luna, se reconstruyó en su imaginación: Habiendo retrocedido algunos pasos, dibujó con la espada en el aire un reto circular y magnífico, prestando a la hoja terrible apariencia.

Entonces Ron, ya vuelto a la realidad, ha advertido su presencia. «He hecho una tontería» debe de haber pensado ; «tenía aquí a mi lado una mosca y yo estaba completamente distraídoInmediatamente ha retrocedido con cautela hasta separarse de la mosca cinco centímetros. Ha transcurrido un instante de espera. Ron se contrae, se repliega como un felino.