United States or Costa Rica ? Vote for the TOP Country of the Week !


Se me pedirá a cada ocasión mi dictamen desde la Corte, y el Rey mesmo acabará por decir: «Esto piensa su señoría, Lorenzo Vargas Orozco, y no habrá más que agregarEntonces, Ramiro, uno de mis primeros pensamientos será llamaros a mi lado; y allí dará principio la verdadera ocasión que el Cielo os depara. Al fin lo comprendo. ¡Por ahí, por ahí! ¡Dios lo quiere! Ramiro meditó.

Además, os lo tengo anunciado como lo menos bello del panorama, y no podéis, en buena conciencia, llamaros a engaño ahora... Y se acabó este primer número del programa... A otro enseguida... y quédense estas puertas abiertas para que se vaya inundando de la gracia de Dios toda la casa...

Cierto día le dijo: La causa de las moriscas va a principiarse. No tardarán en llamaros a testificar. Como estaba junto a la ventana, y miraba en aquel momento hacia la calle, exclamó: Ahí pasa Gonzalo de San Vicente. De fijo que el que va con él es algún maestro de espada; siempre anda en esa compañía.

¡Ah! ¡ah! y ello al cabo, á nadie lo ha dicho más que á . Que sois el escándalo del alcázar. Estimo vuestro favor: no creía yo ciertamente que cuando venía á hablaros del único hombre que ha podido conmoveros... No hablemos más de ese hombre. Como gustéis, porque os veo muy irritada. Vengamos al asunto que me ha obligado á llamaros. Vengamos en buen hora.

No hay ningún inconveniente para negaros esa distracción, Marat, pero preferiría que, desde mañana, permanecierais más tiempo en el jardín con Elena; me desagrada el tener que llamaros como ayer casi al caer la noche. Mirad, llevad a Elena a casa del guardabosque. Catalina es una mujer prudente.

La desgracia es no sentir, tener el corazón de corcho, y la cabeza de hielo; vivir por necesidad, por aquello de que por cien mil y más razones es necesario vivir. ¡Ah! cuando nada os interese en el mundo, cuando nada hostigue vuestro pensamiento, cuando todo os importe nada, cuando no penséis en nada, cuando comáis por no morir y durmáis por que se cierren vuestros ojos; cuando os hayáis convertido en un pedazo de carne insensible á todo, que obra como una máquina; cuando el amor y las locuras de los otros os den hastío, cuando no os encontréis bien en ninguna parte, cuando vuestra alma haya muerto, entonces, entonces si que podéis llamaros desgraciada.

Procuro hablaros razonablemente, y vos me contestáis siempre... Bettina, tengo mucha más experiencia que vos... Escuchadme bien... Desde que llegamos a París nos hemos visto lanzadas en un mundo muy animado, muy brillante, aristocrático... Podríais ser ya, si hubierais querido, Marquesa o Princesa... , pero no he querido. ¿Os sería completamente indiferente llamaros madama Reynaud?

Decidme que apagaréis mis enojos y me amaréis de veras. ¡Ah! ¡Cuándo será que pueda llamaros mi esposa, mi Beatriz, mía! ¡toda mía! Su aliento buscó la mejilla cándida de la doncella. En este instante alguien nombró a Gonzalo de San Vicente y Beatriz oprimiole la mano para que le dejase escuchar.

Sólo cuando penetréis dentro del inviolable seguro podréis llamaros, en realidad, hombres libres. No lo son quienes, enajenando incesantemente el dominio de a favor de la desordenada pasión o el interés utilitario, olvidan que, según el sabio precepto de Montaigne, nuestro espíritu puede ser objeto de préstamo, pero no de cesión.

¡Ah, Dios mío! exclamaron las dos mujeres . ¿Federico estuvo con vos en el jardín? , yo quería llamaros; pero me pidió tanto que no lo hiciera. No tuve el valor de hacerlo. Sus ojos, su voz... Mientras que yo lo oía en un culpable abandono de misma, el peón jardinero se acercó a la abertura del cerco.