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Aquí hay un infeliz que se está muriendo. Oyéronse pasos precipitados, aunque pesados. Eran los de un anciano, de no muy alta estatura, cuya faz apacible y cándida indicaba un alma pura y sencilla. Su grotesco vestido consistía en un pantalón y una holgada chupa de sayal pardo, hechos al parecer de un hábito de fraile; calzaba sandalias, y cubría su luciente calva un gorro negro de lana.

Aquí descubre un arroyuelo, cuyas frescas aguas, que líquidos cristales parecen, corren sobre menudas arenas y blancas pedrezuelas, que oro cernido y puras perlas semejan; acullá vee una artificiosa fuente de jaspe variado y de liso mármol compuesta; acá vee otra a lo brutesco adornada, adonde las menudas conchas de las almejas, con las torcidas casas blancas y amarillas del caracol, puestas con orden desordenada, mezclados entre ellas pedazos de cristal luciente y de contrahechas esmeraldas, hacen una variada labor, de manera que el arte, imitando a la naturaleza, parece que allí la vence.

Llevan unos zapatitos de charol, fina obra de los zapateros de Elda, y sobre el traje negro resaltan los delantales blancos, que se extienden ampliamente por la falda y suben por el seno abombado, guarnecidos de sutiles encajes rojos. Por la mañana, Pepita, Carmen, Lola se peinan en la entrada, luciente en sus mosaicos pintorescos.

Al fin, una noche, hallándose todos los amigos reunidos en la tienda, Velázquez, que estaba de vena, se aventuró á soltar una pullita á su querida, de aquellas con que antes la regalaba y que no pocas veces la hacían derramar lágrimas en presencia de la reunión. Soledad alzó la cabeza vivamente y le clavó una larga mirada luciente y colérica.

Un criado le invitó a entrar en el ascensor, conduciéndolo a un saloncillo del primer piso, al través de cuyos balcones veíase la Puerta del Sol, obscura, con los techos de las casas negros, las aceras invisibles bajo las encontradas corrientes de los paraguas, y la plaza de luciente asfalto surcada por coches veloces, a los que parecía fustigar la lluvia, o por tranvías que se cruzaban en todas direcciones con un incesante campaneo que avisaba a los transeúntes, sordos bajo el abrigo de las cúpulas de tela.

Pero al salir arrogante y altanero del despacho, resuelto a cualquier violencia si se me provocaba a ella, todavía sentí su mirada luciente y acerada en el cogote. Cuando se hubieron pasado los primeros momentos de sorpresa y de cólera y, ya en la calle, pude reflexionar, caí en un profundo abatimiento. Creí que todo había venido al suelo, todo lo que constituía mi felicidad.

Dijo el Corsario, y en su altiva frente Relámpago de luz cruzó luciente Como una exalacion. Volvió á la popa, y se acostó en su asiento, Y en medio de la música del viento Tranquilo se durmió. La aurora aparece con dulce sonrisa Y llena de aromas la atmósfera está, Hermosa goleta que impele la brisa Surcando va el agua del gran Paraná.

Do quiera, hasta en los días de algaradas Era Rizal artista en las veladas. Siempre sus poesías Eran una escultura, O luciente pintura, De sublimes, vibrantes melodías Que por los mares y hasta por los aires Transportaba, en patrióticos donaires, Su artístico altar de estro divino, Del suelo filipino Amor de sus amores, Búcaro inmenso de orientales flores.

Estaban acaso a la puerta dos mujeres mozas, destas que llaman del partido, las cuales iban a Sevilla con unos arrieros que en la venta aquella noche acertaron a hacer jornada; y, como a nuestro aventurero todo cuanto pensaba, veía o imaginaba le parecía ser hecho y pasar al modo de lo que había leído, luego que vio la venta, se le representó que era un castillo con sus cuatro torres y chapiteles de luciente plata, sin faltarle su puente levadiza y honda cava, con todos aquellos adherentes que semejantes castillos se pintan.

Entonces el anciano arrojó lejos de el luciente bisturí, y con las manos juntas, luchando con las lágrimas, se puso a rezar un Pater Noster. El mismo día, a eso de las doce, a través de los terrenos pantanosos que se extienden en varias millas al norte de Gromowo, un ligero carruaje de un caballo se dirigía hacia la pequeña ciudad.