United States or Germany ? Vote for the TOP Country of the Week !


El opulento valle se extiende, largo y angosto, al norte y sur de Valencia, limitado al poniente por las montañas que determinan la curiosa formacion de la alti-planicie de Cuenca. Hácia las alturas del Bonete se desprende de la serranía circular un ramal de cerros que cierra por el sur el valle de Valencia y va á morir sobre la costa de Alicante entre Jijona y Denia.

Cual si no se hubiera realizado la unidad nacional, y el país siguiera dividido en taifas o waliatos como cuando existía un rey moro en Carlet, otro en Denia y otro en Játiva, el régimen de elecciones mantenía una especie de señorío inviolable en cada distrito, y al recorrer en el gobierno de la provincia el mapa político, siempre que se fijaban en Alcira, decían lo mismo. Ahí estamos seguros.

LermaEl rey podrá encontrar en esos papeles el secreto de la expulsión de los moriscos, las causas de su desavenencia con Francia, el por qué de los reveses que sufre en todas partes donde hace la guerra España; el rey sabrá que de los tributos que saca á sus vasallos la tercera parte es para el rey, otra tercera parte para los corregidores, alcaldes mayores y demás exactores, y la otra tercera parte para el nobilísimo, el excelente señor don Francisco de Sandoval y Rojas, marqués de Denia, duque de Lerma, del consejo de Estado, su protonotario en Indias, su secretario universal, su favorito, su todo; sabrá el rey... aunque me mates, porque los papeles se presentarán solos al rey, que ha criado en ti un cuervo, que ha levantado á su enemigo, y como el rey, aunque es débil, no es malo y no le gustan los bribones, y como el rey, aunque no es rey, tiene grandes humos de rey y de rey poderoso; y como el rey es del último que llega, nada tendrá de extraño que su majestad retire de ti su protección y te arroje al verdugo; porque has hecho lo bastante, mi buen duque, para ser primero degradado y después ahorcado.

Pero si no se trata de obediencias, ni de respeto, ni de que toméis ese tono tan grave; lo veo: estáis entregada en cuerpo y alma á Lerma, le teméis; le teméis más que á ; ¿será cierto lo que dicen acerca de que don Francisco de Sandoval y Rojas, marqués de Denia, duque de Lerma, por nuestra gracia, es más rey que el rey en los reinos de España?

El marqués de Denia, que era uno de los que continuamente estaban á su lado le escribió al rey, su hijo, advirtiéndole de esto mismo, á lo que contestaba Cárlos V: «Sufrid con resignacion las impertinencias de mi pobre madre, que el Cielo os recompensaráLo mismo les contestaban las demas personas reales.

Ya la ocupaba á esta señora otro pensamiento que habia venido á acibarar mas su miserable vida. El marqués de Denia le trajo la noticia de haber fallecido su padre; noticia que la puso rematada del todo; invocando sin cesar los nombres de su esposo y de su padre, con tan fuertes y descompasados gritos, que habia ocasiones en que todos temian por su vida.

No amo al rey, pero le respeto... No le ruego, pero me ofende que vasallos se atrevan á mandar en mi casa, y nieta, y hermana, y esposa de rey, no puedo sufrir con paciencia que el trono donde yo me siento esté hollado por traidores; que el rey, á quien estoy unida por la religión y por las leyes, autorice el robo, la tiranía, los cohechos, las infamias de esa especie de gran bandido, que se llama don Francisco de Sandoval y Rojas, marqués de Denia, duque de Lerma, y más que secretario del despacho, verdadero rey de España.

La duquesa de Gandía era acérrima partidaria de don Francisco de Sandoval y Rojas, duque de Lerma, marqués de Denia y secretario de Estado y del despacho. Tenía para ello muy buenas razones, porque sólo apoyándose en buenas razones, podía ser amiga del duque la virtuosa duquesa.

¿Qué razón se opondría al regreso de Pérez, influyendo en el nuevo Rey D. Francisco Gómez de Sandoval, Marqués de Denia, amigo de la juventud, que le había visitado en la prisión arrostrando la cólera del Soberano? . Bien se podía saber que salió de España huyendo del enojo de su Príncipe, sin haber cometido delito de felonía ni hecho cosa contra la corona ; bien se podía juzgar que si había servido con algún consejo ó advertimiento á reyes extraños, era obligado de las circunstancias: ¿no es de ley natural servir al que da amparo? .»

En una de sus ensenadas estaba su pueblo natal y la casa de los Ferragut, cazadores de piratas moros en otros siglos, contrabandistas á ratos en los tiempos modernos, navegantes en todas las épocas, tal vez desde que los primeros caballos de madera aparecieron saltando sobre las espumas que hierven en el promontorio, desde que llegaron los griegos de Marsella para fundar Artemisión, la ciudad de la divina Artemis que los latinos llamaron Diana y tomó definitivamente el nombre de Denia.