United States or Macao ? Vote for the TOP Country of the Week !


¿Y has creído esas calumnias? ¿Y en vez de defenderme y de enfurecerte contra los calumniadores te enfureces contra ? Juanita dejó escapar irreflexiblemente estas últimas frases. Luego se reprimió y procuró enmendarlas. Creía bruto a Antoñuelo, pero no lo creía cobarde. Si dejó de defenderla fue, no por cobardía, sino por maliciosa necesidad que acepta lo malo como cierto.

25 que con mansedumbre enseña a los que se resisten, si por ventura Dios les que se arrepientan y conozcan la verdad, 1 Esto también sepas, que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos: 3 Sin afecto natural, desleales, calumniadores, sin templanza, sin mansedumbre, sin bondad, 4 traidores, arrebatados, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios;

Para hacernos dar al diablo, respondió Martin. ¿No se pasma vm., siguió Candido, del amor de las dos mozas del pais de los Orejones á los dos ximios, que conté á vm.? Muy léjos de eso, repuso Martin; no veo que tenga nada de extraño esa pasion, y he visto tantas cosas extraordinarias, que nada se me hace extraordinario. ¿Cree vm., le dixo Candido, que en todos tiempos se hayan degollado los hombres como hacen hoy, y que siempre hayan sido embusteros, aleves, pérfidos, ingratos, ladrones, flacos, mudables, viles, envidiosos, glotones, borrachos, codiciosos, ambiciosos, sangrientos, calumniadores, disolutos, fanáticos, hipócritas y necios? ¿Cree vm., replicó Martin, que los milanos se hayan, siempre engullido las palomas, quando han podido dar con ellas?

Y con pobre mesa i casa en el campo deleitoso á solas su vida pasa: con solo Dios se compasa ni envidiado ni envidioso. Asi se lamentaba del mortal odio i demasiado poder de sus calumniadores: de la seguridad i ventaja con que estos le hacían guerra: del olvido de algunos de sus amigos: de la vana é impotente compasion de otros, i de las interrupciones i dudoso éxito del proceso.

General, ya que le estorba tanto ese ingenierillo, no tiene mas que darnos una orden. Es lo más fácil librarse de él. ¡Como si el general necesitase de tales consejos! Eran muchos los que habían desaparecido misteriosamente de la existencia diaria, y los calumniadores pretendían que únicamente Castillejo podía saber dónde estaban. Todos debajo del suelo.

Este interrogatorio me va cansando y agotaría la paciencia de un santo... No tengo nada que decir a usted y nada le diré... ¿Qué quiere usted que yo sepa de Luciana? ¡Es usted asombroso, palabra de honor! No estará contento hasta que le diga horrores de la mujer con quien se va a casar... Me importa, señora, conocer esos «horrores» para desenmascarar a los calumniadores y hacerles arrepentirse...

Claro está que vuestra merced habrá de tener también sus envidiosos y calumniadores; pero no pare mientes en eso, que lo que agora dicen habrá de llevárselo el viento como la paja. ¿Y piensa vuesa Reverencia que alguien murmure? preguntó Ramiro. Habladurías, habladurías replicó el religioso con ademán de desprecio.

8 Mis santuarios menospreciaste, y mis sábados has profanado. 9 Calumniadores hubo en ti para derramar sangre; y sobre los montes comieron en ti; hicieron en medio de ti suciedades. 10 La desnudez del padre descubrieron en ti; la inmunda de menstruo forzaron en ti.

Tardó aún cosa de dos minutos en recobrar la expedición de la lengua y en poder escupir al ventarrón, cada vez más desencadenado y furioso, una retahíla de injurias contra los infames calumniadores del partido de Trampeta. El granuja de don Eugenio le dejó desahogar, y luego añadió: Aún hay más, más.

A los tres días, pocas horas antes de expirar el plazo, después de reposar en Oviedo y de aprestarse para el combate, sonaron las trompetas y entró en el palenque el Caballero del Azor, con la visera calada y la lanza en la cuja. En alta y sonora voz proclamó la inocencia de D. Fruela, llamó calumniadores a los que le acusaban, y retó a los tres, o sucesivamente o juntos contra él solo.