United States or Norfolk Island ? Vote for the TOP Country of the Week !


Últimamente andaba empeñado en la obra, que llamaba él redentora, de publicar un periódico, que se imprimiría en la capital, porque allí, en Villavieja, no había imprenta todavía... ¡Tendría que leer lo que dijera ese periódico escrito por un trastuelo que discurría y pensaba como Maravillas, en una población de tan sanas ideas como Villavieja!

Llegan coches y más coches, llegan los artistas que entran por otra puerta seguidos de amigos y admiradores. Paulita ya ha entrado y continúa Tadeo: Esas son las sobrinas del rico Capitan D, esas que vienen en el landó; ¿ves qué hermosas y sanas son?

Por las vidrieras de las ventanas pasaban y repasaban, mecidas por el viento, las verdes copas de los árboles del jardín. La mesa era servida por criadas jóvenes, de rizados y blancos delantales. Sus caras, sanas y rojas como melocotones, daban una impresión de perfume primaveral semejante al de las flores que adornaban la mesa. Aresti estaba sentado al lado de su prima.

Pero importa más trabajar en precaver el mal que en reparar el ya existente. Las chozas infestadas, tan pintorescas á veces en el paisaje, deben desaparecer para que las sustituyan casas cómodas y sanas. Deben entrar libremente aire y luz en todas las habitaciones humanas. Debe observarse en todas partes una buena higiene para el cuerpo, unida á perfecta dignidad moral.

Hacen tres comidas por dia, abundantes, sencillas y sanas, y despues de cada una de ellas salen por turno a pasar media hora al aire libre en alguno de los patios. Solo un caso de evasion ha ocurrido hasta ahora, y eso por negligencia de un celador. Jamas recluso alguno ha perdido la razon ni atentado contra los guardianes.

Alejo era un joven bastante feo, hijo de honrados padres, chico de estudio, de sanas y muy honestas costumbres, pobre de solemnidad, y bueno como una manzana. Vivía encajonado en su buhardilla, y desde allí contemplaba los gorriones que iban á pararse en la chimenea y los gatos que retozaban por el tejado.

Las medio rotas eran las menguadas, Las sanas las felices, y con esto Eran todas en todo apresuradas. Apolo luego con alegre gesto Abrazó á los soldados, que esperaba Para la alta ocasion que se ha propuesto. Y no de un mismo modo acariciaba A todos, porque alguna diferiencia Hacia con los que él mas se alegraba.

¡Un baúl! se decía Melchor, ¡un baúl es lo más parecido a una persona!... ¡Pero si es cierto!... No hay nada tan parecido a los hombres como los baúles... Un baúl nuevo como éste es igual, igualito a un recién nacido... ¿Qué se le va a poner adentro...? ¡Psh!... ¡tantas cosas...! A éste le toca recibir ropa limpia ahora; pero cuando vuelva, ¿cómo vendrá esta ropa?... ¿habré usado toda?... ¿volverá sucia?... ¿traerá toda?... ¿traerá menos?... ¿se le agregará ropa ajena?... acaso sucia... quizá limpia... ¡quién sabe!... ¡Pero cómo se parece un baúl a una persona!... Por lo pronto éste es igual a : le cabe en suerte recibir ropa limpia... algunos libros de ideas sanas y servir para un viaje proyectado con la mejor intención...

Era un antiguo discípulo de Deusto, que, después de abandonar la Universidad, seguía á las órdenes de los Padres de la Compañía lo mismo que cuando estudiaba en sus aulas. La juventud de Bilbao, que se llamaba á misma distinguida, admirábale por su fuerza muscular y el entusiasmo con que sustentaba las sanas ideas de los buenos padres.

Continuaba yo viendo a Agustín, no en momentos perdidos; le buscaba por el contrario, y le hallaba a mi disposición cada vez y eran frecuentes que experimentaba la necesidad de sumergirme en aguas más sanas. No podía darme consejos mejores, ni era dable que me procurase consuelos más eficaces.