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Compadecióse el rey de la humana naturaleza, contemplando que de sesenta y quatro baylarines los sesenta y tres eran ladrones rateros, y se dió á la galería obscura el título de corredor de la tentacion.

En esas piezas altas tienen sus puntos de reunion los caballeros de industria subalternos; ahí duermen los limpiabotas y los saltimbancos de menor cuantía, las fruteras de calle, los vendedores de baratijas, los músicos de callejuela, y multitud de vagos de diversas clases que no son literalmente mendigos; ahí esconden sus andrajos los rateros de alguna importancia y los pillos que especulan con las intrigas de los seductores; ahí descansan de su larga fatiga del dia, despues de doce ó diez y seis horas de trabajo, millares de esos pobres obreros ambulantes de pequeño salario, así como los repartidores de diarios y sus semejantes; y por último, ahí tienen su hogar envilecido las innumerables prostitutas y meretrices que hormiguean por las calles de Londres, pero que, por su fealdad, su edad ú otras circunstancias, no pertenecen sino á la plebe de las infames.

El bajo pueblo no se atrevia á morar en las tierras del rey, y se iba en busca de otras prebostias y otros señoríos, por lo cual las tierras del rey estaban tan desiertas, que cuando el Preboste daba audiencia, no asistian á ellas arriba de diez ó de doce personas; pero en cambio, habia tantos malhechores y rateros dentro y fuera de la ciudad, que toda la comarca estaba llena.» Y para que el Sr.

Preciso es confesar que hubo el mayor acierto, pues el plan de curación empleado dió unos resultados excelentes, de tal modo, que las defunciones perrunas comenzaron á disminuir con gran complacencia de los amos, que volvían á recuperar sanos y salvos á sus mastines, pechones, rateros, galgos y podencos, cuyas vidas habían visto en peligro.

Es el funcionario inamovible encargado de advertir á los gorriones que el trigo no se ha sembrado para ellos. ¡Ah! los gorriones, lo más canalla de la creación, la casta de pillos y rateros más desvergonzados que hay sobre la tierra.

Raza de herreros y estañadores y de gentes que no tienen una nocion regular de la idea de la propiedad, tradicionalmente habituadas á los fraudes, los robos rateros, las mistificaciones y los procederes hipócritas, los Gitanos han comprendido sin duda que sus habitaciones debían ser apropiadas á la ocultación y el disimulo.

Como el alboroto, que promueven, va creciendo por momentos, acude un vecino á averiguar la causa, y sabe que se trata del precio, á que se han de vender ciertas aceitunas, que no existirán hasta que transcurran muchos años, y se esfuerza en apaciguar tan ridícula disputa. Otro paso refiere una graciosa astucia de dos rateros.

Un grupo de mozuelos apostados en los solares inmediatos hacía frente a los acometedores, con la arrogancia de la juventud. Eran los valientes que surgen en toda revuelta, los héroes de la calle, que son cantados por la más alta poesía cuando triunfa una revolución, o van a la cárcel con los rateros cuando intervienen en un motín.

Antonio Santaló era un muchacho cordobés que iba a verme al café y a quien solía encontrar, como una sombra, en la Puerta del Sol, muy de madrugada, a esa hora terrible de los que no tienen un puñadito roñoso de calderilla para ir a dormir a casa de Han de Islandia o a los sótanos de la Peña de Francia, los hoteles de cincuenta céntimos, donde se guarecen los buscones, los poetas pobres y los rateros.

Preguntéle para qué se hacia aquello, y respondióme, que asi como de los dientes de la serpiente de Cadmo havian nacido hombres armados, y de cada cabeza cortada de la Hidra que mató Hercules, habian renacido otras siete, y de las gotas de la sangre de la cabeza de Medusa se havia llenado de serpientes toda la Libia; de la mesma manera de la sangre podrida de los malos poetas que en aquel sitio havian sido muertos, comenzaban á nacer del tamaño de ratones otros poetillas rateros, que llevaban camino de henchir toda la tierra de aquella mala simiente, y que por esto se araba aquel lugar, y se sembraba de sal, como si fuera casa de traidores.