Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 6 de septiembre de 2025


Pero no dejéis de mirar; al reflejo del sol sucede el de los purpúreos vapores del horizonte. Ilumínase de nuevo la montaña, pero con más suave brillar. Parece que no existe la roca dura bajo su vestidura de rayos: sólo queda un espejismo; una luz aérea: parece que el soberbio monte se desprendió de la tierra y flota en la pureza del cielo.

Ana que se dejaba devorar por los ojos grises del seductor y le enseñaba sin pestañear los suyos, dulces y apasionados, no pudo en su exaltación notar el amaneramiento, la falsedad del idealismo copiado de su interlocutor; apenas le oía, hablaba ella sin cesar, creía que lo que estaba diciendo él coincidía con las propias ideas; este espejismo del entusiasmo vidente, que suele aparecer en tales casos, fue lo que valió a don Álvaro aquella noche.

El espejismo no es sólo, tal como lo dice la física moderna, una ilusión de la vista producida por la refracción de los rayos del sol al través de un plano en el que la temperatura no es en todas partes la misma; es también con frecuencia una alucinación del fatigado viajero.

¡Ay, el espejismo seductor de los países de sol! ¡La embriaguez engañosa de la luz y los colores!... ¡Y ella había podido sentir un amor de unos cuantos meses por aquel mozo rudo y grosero, y había celebrado como rasgos ingeniosos las torpezas de su ignorancia, y hasta le exigía que no abandonase sus costumbres, que oliera a toro y a caballo, que no borrase con perfumes la atmósfera de fiera animalidad que envolvía a su persona!... ¡Ay, el ambiente! ¡A qué locuras impulsa!...

Pero, desde que los grandes objetivos del hombre, intoxicado de terrores y de esperanzas sobre la vida futura, vinieron a estar fuera de este mundo, este mundo quedó fuera de la atención de los hombres, y por ende, las leyes naturales, que han proporcionado los maravillosos recursos de la civilización moderna, quedaron en la edad media fuera del alcance del entendimiento humano, totalmente absorbido por la preocupación angustiosa de las entidades y de las cosas sobrenaturales, deslumbrado por el espejismo del otro mundo hasta dar la espalda a la vida real y el frente a la vida imaginaria, por entender que la más alta y noble ambición del hombre era la de "sentarse eternamente a la diestra de Dios padre", después de muerto, con lo que resultaba estúpido, degradante y vil todo anhelo de felicidad antes de morirse.

Es la vida espejismo de sueños y palabras, y su embriaguez me ha puesto amargor en la boca, vomitan el veneno por sus bocas macabras. Filósofo, Poeta, que mirais las cosas tristes de este mundo, uno, muy profundo, con ojos de asceta, y otro, como rosas; los dos en mi vida pusísteis un mal: uno abrió una herida, otro abrió un rosal.

Los compañeros de armas de don Fernando recordaban el período heroico de su vida, las partidas en la Sierra, dando cada uno gran abultamiento a sus hazañas y penalidades, con el espejismo del tiempo y de la imaginación meridional, mientras el antiguo jefe sonreía como si escuchase el relato de juegos infantiles.

El mundo era una ilusión de los sentidos, un espejismo de la imaginación. El mundo de fuera era creación aparente y engañosa del mundo de dentro. Belarmino, entonces, resolvió poner en orden de paz y hermosura su mundo interior, y, por lo tanto, el mundo exterior, que no es sino eco o imagen sensible del otro.

A eso conduce el desprecio por todo lo que no esté a la altura de nuestro nivel circunvecino; a eso conduce la fiel observancia de ideas que nos inculca la vanidad, la petulancia y el espejismo social, tras del que vamos como locos, fascinados por ideales quiméricos o absurdos, mientras la verdadera filosofía, la del pueblo, la del buen pueblo manso, trabajador y resignado, ¡es despreciada por su origen «bajo»! ¡ése es el resultado de los que prefieren el libro con lujosa encuademación!... por ahí se empieza o por ahí se acaba lo que es peor, porque suele marcar el último tramo de una verdadera perversión en las ideas que regulan nuestra manera de ser y en oposición al criterio con que se le enseñó al maquinista a sentirse bien, «por lo conforme», se te ha taladrado los oídos con un grito ruin y perverso que me parece estar oyendo: «es necesario no conformarse con eso»: y así has vivido , y también, ¡y todos! torturándose en la estúpida ambición de ambiciones nuevas.

Palabra del Dia

passaro

Otros Mirando