United States or Taiwan ? Vote for the TOP Country of the Week !


A medida que el teniente coronel leía el billete, cambiaba de color su rostro; temblaba, presa de una agitación violenta; pero, tomando una doble resolución, se aproximó al joven, que le contemplaba desdeñosamente. Caballero dijo; ¡cuánto deben costar estas palabras a un español!... ¡no tenía razón! Sería un infame si tirase de la espada en semejante combate: lea usted.

Los caballos no pueden defenderse, porque si el toro no hallase donde cebarse y tirase siempre los derrotes al aire, concluiría por huirse, como es natural, y no se podría lidiar en las otras suertes.

Efectivamente, al prohibir los duelos en distintas épocas, no se ha hecho más que lo que haría un jardinero que tirase la fruta queriendo acabarla; el árbol en pie todos los años volvería a darle nueva tarea.

Soltaba sus palabras atropelladamente; inclinaba la cabeza, como si el chorro de su verbosidad tirase de ella. El liberalismo, señor de Maltrana, y todo eso del progreso y las revoluciones está condensado en pocas palabras; lo que yo digo: «matar, robar y no hacer daño a nadie...» Matan el alma, se la roban a Dios, y después dicen que no hacen ningún daño... ¡La libertad!

Preguntamos y volvimos a preguntar, y nadie respondía, que aquí es costumbre muy recibida: pareció por fin un hombre, digámoslo así, y un hombre tan mal encarado como el birlocho: expúsele el caso, y pedíle mi señal en vista de que yo no alquilaba el birlocho para tirar de él, sino para que tirase él de .

Otro: -Ya tienen escogidas plumas los señores alcaldes, para que entréis bizarra. Al fin, trujeron el picarón, y atáronlos entrambos. Pidiéronme perdón y dejáronme solo. Yo quedé algo aliviado de ver a mi buena huéspeda en el estado que tenía sus negocios; y así, no tenía otro cuidado sino el de levantarme a tiempo que la tirase mi naranja.

Esperaban que terminase el lance en reconciliación, y ya que no en almuerzo, porque la cena estaba reciente y no tenían gana, en otra nueva cena aquella noche en el mejor restaurante de Río de Janeiro. Pero el hombre propone, y no siempre Dios sino el diablo dispone. Nadie imaginó, por bien que en su sentir el gaucho tirase, que lo que ocurrió fue el resultado de su tino.

Y si la niña le tirase un guante diciéndole: Bésalo, quisiera ver en qué forma se negaba a besarlo. ¿Te vas calmando, Gonzalo? dijo disparándole una sonrisa capaz de volver loco a San Antonio. Así, así. Bueno, pues ahora hablemos en serio... hablemos de nuestra situación... Gonzalo se puso serio.

Y sentado junto a ella estaba Maltrana, el heroico Maltrana, expresándose con vehementes gesticulaciones, echando el busto hacia adelante, cual si la muchacha tirase de él con magnética fuerza. Al ver a su amigo, mostró Isidro cierta turbación, se cortó su verbosidad, lo mismo que si acabara de sorprenderle en algo vergonzoso.

Pensó en su familia, en las desgracias y peligros que le rodeaban, en la dificultad de volver á encontrar á los suyos... Como si la música tirase de él, descendió poco á poco al piso bajo. ¡Qué artista aquel hombre altivamente burlón! ¡Qué alma la suya!... Los alemanes engañaban á primera vista con su exterior rudo y su disciplina, que les hacía cometer sin escrúpulo las mayores atrocidades.