Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 13 de junio de 2025
Quería significar con esto que el arriero que compraba en Villalegre vinagre de yema, por lo común muy fuerte, llenaba sólo dos tercios de la cavidad de la corambre, y la acababa de llenar por la mañana temprano, antes de emprender su viaje, mitigando y suavizando con el agua de la fuente la fortaleza y acritud del líquido, y ganándose así, desde luego, un treinta y tres por ciento, aunque vendiese el vinagre al mismo precio en que lo había comprado.
Quiero hablar poco de mí, sobrellevar con paciencia las contrariedades y las humillaciones que pueda soportar sin menoscabo de la dignidad humana, no rebuscar en mi tocado vanidad alguna, no reprender a mis hijos y a otras personas con acritud ni enredarme nunca en discusiones; quiero asimismo no decir jamás una palabra que pueda molestar al prójimo, presente o ausente.
De modo que tú encuentras que aquí la gente no es mala siguió diciendo Francisca con una recrudescencia de acritud. Pues se pasa la vida arañándose, mordiéndose, desgarrándose y devorándose. Hasta la vista, Francisca dije para cortar aquella inundación de invectivas... Sin el capitán Tronchet, no dirías todo eso... Puede ser respondió Francisca en un rasgo repentino de buen humor.
Tú eres la elegida. Toma el reloj y entrégaselo. Yo no tengo nada que entregar, puesto que nada es mío responde con acritud la doncella. Pero has sido elegida por el vencedor, niña. Ningún trabajo te cuesta entregarlo. Si me cuesta ó no trabajo no lo sabe usted. Lo que le digo es que no quiero. En vano fué que la instaran muchos de los presentes.
Tristán clavó en ella sus ojos con expresión colérica. Me estás probando de esa forma dijo con acritud que mis recelos no son infundados. Desde hace algún tiempo parece que todo el mundo pone empeño en hacerme comprender que debo estar no sólo satisfecho sino muy agradecido a que se me conceda tu mano.
En El buen paño..... apenas hay acción: no hay nada de drama; pero hay mucho, y a mi ver excelente y precioso, ora de idilio sin afectación sentimental, ora de comedia, o ligera y suave sátira sin acritud ni amargura. Los afectos amorosos no se exageran por lo ardientes para que quemen, ni por lo dulces para que empalaguen.
Entre ella y el cuñado, habían habido ya ligeras escaramuzas, alfilerazos que no se olvidan, por la intención de la frase y la acritud del acento. Un día, disputando por fruslerías, él la llamó: ¡Solterona! y ella: ¡Perdulario! y en una ocasión le dijo ella, que no debía darse tantos humos, cuando allí tenía casa y comida gratis y se le había matado el hambre.
Se reconciliaron. El aceite juntó su pringosa suavidad con la acritud astringente del vino, y batidos y juntados sellaron el pacto, cuando los dedos gordezuelos de Nazaria vendaban aquella frente merecedora del yugo para tirar de un arado.
Hablando con los hombres era frío, de pocas y secas palabras; pero esta frialdad y aspereza subían de punto al tratar con las mujeres: para ellas sólo tenía en los labios acritud y en el pensamiento recelo. Su juventud y la vida libre del clero en aquellas tierras, hacían resaltar más esta antipatía a la mujer.
Después, acumulando en su rostro todos los rasgos de desdén y acritud de su gran repertorio, dijo: ¡Ah! señor don Silvestre, con mucha razón le sorprenden á usted los despropósitos de este joven; pero no tiene usted en cuenta que ha vivido hasta hace poco en el más lamentable extravío. Ya se corregirá; hay una persona que ha tomado á cargo su educación, y creemos que logrará el intento.
Palabra del Dia
Otros Mirando