Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 22 de junio de 2025


La madre contestó por ella: Niña, no seas mal criada; contesta a tu tío lo que debes contestar: Tío, con mucho gusto; cuando Vd. quiera. Este Tío, con mucho gusto; cuando Vd. quiera, entonces, y varias veces después, dicen que salió casi mecánicamente de entre los trémulos labios de Pepita, cediendo a las amonestaciones, a los discursos, a las quejas y hasta al mandato imperioso de su madre.

Le atemorizaba la tribuna pública, donde no se había movido nadie, aguardando sin duda la rectificación del venerable orador: toda aquella aglomeración de blusas blancas y pecheras sin corbata, rematadas por cabezas morenas que le miraban con fija frialdad como diciendo: Ahora veremos lo que contesta ese tío.

Cuando acaba la pieza, Orsi se levanta sudoroso y Azorín le ofrece un refresco. No, no, Azorín contesta Orsi; tengo miedo... un poquito de cognac... El concierto vuelve a empezar. El arco pasa y repasa; el violoncello canta y gime. Un mozo discurre con una bandeja; la concurrencia se va retirando calladamente. Y el violoncello se queja discreto, sonríe irónico, parte en una furibunda nota larga.

Cuando, a pesar de su deplorable situación, a Serafina, que le cuida, la mira con ojos encandilados y lo ve doña Inés, esta le dice: ¿Es posible, Alvarito, que no te abandone el demonio que te posee? ¡El vicio, que huye de todo tu cuerpo, se te mete en la cabeza y no te deja! ¡Da asco y vergüenza! ¡Ta, ta, ta, ta, ta! contesta don Alvaro.

Calla de pronto el coro escolar, y por las ventanas abiertas llega hasta nosotros la voz de un niño, el más aplicado tal vez, que recita una fábula: La cigarra y la hormiga. Como el griterío de una muchedumbre alborotada que contesta á ultrajantes alusiones, suena el chín-chín de numerosas cigarras moviendo sus cimbalillos entre las cortinas del follaje.

¿Cómo? preguntó cándidamente Paulita; ¿son esas las salvajes que usted dice? No, contesta Juanito imperturbable; se han equivocado... se han cambiado... Esos que vienen detrás. ¿Esos que vienen con un látigo? Juanito hace señas de que , con la cabeza, muy inquieto y apurado. ¿De modo que esas mozas son los cochers?

»Si usted demora su vuelta y mi tío muere antes de que ésta se verifique, yo ingresaré en un convento. »Si no contesta a esta carta ya no volveré a escribir. ¡Amaury, tenga usted compasión de su hermana! »Antonia.« «10 de marzo. »No he recibido esas cartas de que usted me habla, Antoñita, o por mejor decir, no he querido recibirlas.

Sin embargo, en uno de los manuscritos que consulto, interrogado su autor sobre este mismo hecho, contesta: «Que no sabe que Quiroga haya tratado nunca de arrancar a sus padres dinero por la fuerza»; y contra la tradición constante, contra el asentimiento general, quiero atenerme a este dato contradictorio. ¡Lo contrario es horrible!

En cuanto le digo que me faltan marineros me contesta que los guise á todos con salsa de Gascuña. Me dirigí á los arqueros. ¡Que si quieres! Allá se están las horas muertas jugando á los dados, presididos por el sargento Simón y Reno, y el gigantón cabeza roja que le rompió el brazo al pirata. "Mirad que el Galeón éste se va á hundir de un momento á otro," les digo.

Y los dos callan, sin saber lo que decirse en estos momentos supremos en que van a separarse acaso para siempre. Azorín dice Sarrió , ¿usted no vendrá más por aquí? No , Sarrió contesta Azorín ; es muy posible que no vuelva. Entonces, ¿no nos veremos más? , acaso no nos volvamos a ver más. Han callado un instante. Y se ponen otra vez en marcha.

Palabra del Dia

rigoleto

Otros Mirando