Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 9 de junio de 2025
Nunca habría dejado a la señora Baronesa dijo a madama Norton, si la casa hubiera seguido en el mismo pie de lujo; pero la señora Baronesa tiene cuatro hijos, dos que han hecho locuras, y dos niñas que pronto serán casaderas, y deberá dotarlas. En fin, la señora Baronesa se ve obligada a estrecharse, y la casa no es bastante importante para mí.
La baronesa de Bivot, el bizarro Zumalacárregui, rompió el fuego la primera con la certera puntería de la lógica más exacta. El pensamiento no puede ser más caritativo ni más santo, y supongo que merecerá la aprobación de todas estas señoras, como merece la mía dijo, echándose lentamente fresco con el abanico . Pero debo hacer notar que en la campaña del Norte hay dos ejércitos españoles...
Además, no ignoraba ella que la noticia de su matrimonio y consiguiente salida de la casa, era para la baronesa un trance horriblemente desagradable, y el solo placer de darle ese justificado mal rato venía a satisfacer la pasión más violenta que existe tal vez en la tierra; el odio de mujer contra mujer.
Señora baronesa comenzó el pintor , la señorita Beatriz me ha dicho que tenía usted a bien aprobar la unión que tengo la audacia extremada de ambicionar... Mil gracias le doy a usted por mi parte, señora, con tanto mayor motivo cuanto que usted se priva en mi obsequio de una compañía, de una intimidad de quien nadie mejor que yo conoce el precio. ¡Dios mío! ¿Qué quiere usted, señor Fabrice?
No podemos dejarla así... deseamos ponerla sobre la cama... ¿Quiere usted? Pero él no contestó, ni pareció siquiera haber oído, y al ponerle la Baronesa una mano en el hombro, tembló como sacudido por una corriente magnética: su mirada extraviada, perdida, desconsolada expresaba una angustia tan pavorosa, que la locuaz señora se encontró por un momento con que le faltaban las palabras.
Lloro por mi señor y por el valiente Simón Aluardo, y no sé cómo atreverme á comunicar la pérdida del primero á la baronesa y á su hija, suponiendo que no tengan ya noticia de su desgracia. ¡Ay de mí! exclamó Tristán dando un gemido que espantó á los caballos. Duro es el trance en que os véis y también yo lamento la muerte de ambos.
Cualquiera de aquellos dos arrogantes y espléndidos rústicos habría sido llamado con razón El Rey de los Tíos..... Y, en efecto, por su corpulencia, por su lujo y por su inocente y cómica ufanía, había en ellos mucho del pavo real. La Baronesa del Zurguén nos dijo que eran dos charros de primera, y que debían de proceder del campo de Ciudad-Rodrigo, tierra clásica de tales prójimos nuestros.
Ha conseguido volverme loco... me ha hecho perverso en todo sentido... ¡Ah! le juro que ella misma ha de convencerse de lo que digo. ¡Ahora hace un instante, me negaba un favor baladí... y todo por ultrajar a esa mujer... que vale bien poco, es verdad... pero que, de cualquier manera que sea, es mejor que ella...! ¡Pues bien, o nos dará una satisfacción a la baronesa y a mí, o le mataré a su marido!... De todos modos lo aborrezco; un hombre honrado y todo lo que se quiera... pero a quien aborrezco, sí... ¡hará el retrato de mi amante o lo mandaré al otro mundo!...
¡Jesús, hijas!... ¡Qué perfume!... ¡Qué horror! exclamó la baronesa . Beatriz, en seguida mi tarro de sales; luego, que estas señoritas te den sus redes y llévalas a la cocina. Perdone usted, tía dijo el marqués de Pierrepont, tomando vivamente aquellos artefactos ; las voy a llevar yo.
Está convenido que Petra no se casa con menos de un millón. No se puede vivir con menos de seis u ocho mil pesos al año dice a cada momento el Barón de Brenay. Es lo justo para no morirse de hambre añade la Baronesa.
Palabra del Dia
Otros Mirando