Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 7 de julio de 2025


Stein, al llegar al Calvario, desahogó la aflicción que le oprimía, dirigiendo una ferviente oración al Señor del Socorro, cuyo benigno influjo se esparcía en toda aquella comarca como la luz en torno del astro que la dispensa. Rosa Mística estaba en su ventana cuando los viajeros atravesaron la plaza del pueblo.

Una terrible angustia le oprimía el corazón... Antes de separarse de él para siempre, hubiera deseado dejar a este muchacho que era hijo suyo un recuerdo material de su afecto, algo que obligase a Simón a pensar en él alguna vez siquiera... Súbitamente se acordó de que poco antes, cuando le preguntó si llegarían a tiempo, había dicho el joven que no tenía reloj, y se le ocurrió la idea de ofrecerle el suyo.

No saldrás sino pasando sobre mi cadáver» gritó con cavernosa voz Relimpio, sintiéndose héroe de teatro. Y al decirlo, oprimía contra su pecho la llave para protegerla de un ataque de su enemiga. «Vamos, vamos, que no tengo ganas de bromitas dijo la de Rufete encolerizada . Venga la llave, o la tomaré dondequiera que la encuentre.

Una angustia deliciosa me oprimía el pecho blandamente. Sentía escalofríos de anhelo y voluptuosidad, cual si me hallase a las puertas mismas de la dicha. Pasado aquel extraño transporte, que debe achacarse en gran parte a la material impresión del movimiento, me sentí tranquilo; pero me confesé ingenuamente que estaba enamorado de la monja sevillana mucho más aún de lo que había imaginado.

Dos ó tres ventanillas, completamente abiertas y martirizadas por los vendavales, pendían de un solo gozne, é iban á caer de un momento á otro, apenas soplase una ruda ventolera. Aquella ruina apenaba el ánimo, oprimía el corazón.

Cuando él decía la hora justa, ella suspiraba y el corazón se la oprimía más, todavía más; pasó a la sala, abrió la ventana, y a pesar del frío, se estuvo asomada, espiando el paso de los transeuntes. Ahí viene alguien, ¿será él? parece que se detiene... no, sigue; ahí viene otro, pero pisa más fuerte que él...

Aunque era la noche una de las primeras del otoño y nada fría, ardían en el hogar gruesos leños cuyo humo salía en parte por la chimenea y en parte invadía también la estancia y oprimía las gargantas de cuantos en ella se encontraban. Sobre el fuego se veía un gran caldero cuyo contenido hervía á borbotones y despedía el más apetitoso olor.

A personas muy muchas oprimia, A viejos Españoles muy honrados, Que á los mozos traviesos consentia En sus vicios andar muy desmandados. Con esto y otras cosas que hacia, Estaban los juicios ofuscados De todos, el remedio no esperando, Si no morir con pena suspirando.

El camino atravesaba este río por un puente de un solo arco; luego remontaba la pendiente opuesta trazando un surco blanco á través de un arenal inmenso, árido y absolutamente desnudo, cuya cima cortaba el cielo sensiblemente á nuestro frente. Cerca del puente, en el borde del camino se levantaba un casucho solitario, cuyo aire de profundo abandono, oprimía el corazón.

Olvidó la recomendación del doctor y su promesa; extinguiose su memoria para dejar paso al delirio más extraño y a partir de aquel instante ni vio ni oyó nada más de cuanto le rodeaba; toda su alma la tenía concentrada en Magdalena, cuyo flexible talle oprimía con su brazo.

Palabra del Dia

buque

Otros Mirando