Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 8 de mayo de 2025


El jefe de los mecánicos de la flota aérea estaba allí con varios de sus ayudantes para abrir el cofre, cuyo cierre había estudiado durante toda la mañana. Colocaron los esclavos esta caja en el suelo verticalmente, mientras el ingeniero y sus acólitos empezaban á forcejear en la cerradura, sin resultado.

Cuando entre en ella y cierre tras la puerta y se vea otra vez solo, lanzará un suspiro y pensará que hoy se le ha disipado una esperanza. Azorín ha recibido hoy una carta; la fecha decía: Petrel; la firma rezaba: Tu infortunado tío, Pascual Verdú. ¡Pascual Verdú! Azorín, de lo hondo de su memoria, ha visto surgir la figura de su tío Verdú.

, señora, me he vuelto muda fue la única respuesta de la buena mujer . Puede que cuando la señora se canse y cierre el pico, lo abra yo para decirle... en fin, no digo nada». «Ja, ja... Di lo que quieras... prosiguió Doña Paca . ¿Te atreverías a decir algo ofensivo de ? ¡Que no he sabido llevar el Cargo y Data! ¿Y qué? ¿Quién te ha dicho a ti que las señoras son tenedoras de libros?

No llegamos a Río Janeiro hasta pasado mañana dijo Isidro, siempre bien enterado de la marcha del viaje . Pero la despedida ha sido hoy, para que la gente que se queda en el Brasil pueda dedicar el día de mañana al arreglo y cierre de equipajes. Esta noche es la última de gran ceremonia, y las señoras van a guardar sus vestidos y joyas.

Dejadme primero que cierre, que con la alegría de veros, de cerrar la puerta me he olvidado; y con que pase un alguacil y lo vea, multa tendremos, y no estamos para esos lujos, que los tiempos andan muy magros.

¡Desgraciado preceptor!... No olvide usted, amiguito, que esta noche hemos de ir a casa de Poenco. ; a olvidarme iba. Las carnes me tiemblan ya del gusto. ¿Dices que va Pepilla la Poenca? Y toda la flor de la majeza. Me parece que no ha de llegar el momento en que mi señora mamá cierre los ojos. Aguardo en Puerta de Tierra. Puerta del Cielo debía llamarse. ¿Irá también la Churriana? También.

Ya se irá apagando también..., porque señales de lo contrario no deben de ser. ¡A buen tiempo!... Sin embargo, no me resignaría a que ese pobre hombre me apuntara en su libro verde con suficientes motivos. ¡Vea usted cómo puede haber un grano de arena que cierre el paso a una mujer que nunca se ha detenido delante de una montaña!... Es raro eso... Pero ¡qué criatura aquélla!

Comprendo que usted dejará de visitarnos por un tiempo; pero, si no se va a Buenos-Aires, tendrá usted que aguantar nuestra presencia... Pues con Adolfo iremos a verlo frecuentemente a la estancia, para que no esté allí solo como un monje, con sus pensamientos... siempre que usted no nos cierre la puerta...

Sin embargo, durante el camino dirigí algunas miradas investigadoras a todos lados, con la vaga esperanza de ver la figura de mi monja entre las varias que cruzaban a lo lejos por las galerías desiertas. Por lejos que fuese, tenía absoluta seguridad de reconocerla. Salimos del primer patio y entramos en otro más grande con arquería de piedra también, pero sin cierre de cristales.

ABIND. Tanto estimo... ALBOR. Venme después a hablar. ABIND. ¿Qué así me dejas? ALBOR. Perdona un poco. ABIND. Mi esperanza animo: Cierre la puerta el alma a tantas quejas. Hermosas, claras, cristalinas fuentes, Jardines frescos, celebrados árboles, Que aquí me vistes de Jarifa hermano, Ya no soy el hermano de Jarifa; Ya puedo ser su amante y ser su esposo: Dad todos parabién a Abindarráez.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando