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Y lo voy a hacer, , lo hago y me cuelgo si no me miras y me dices algo... Cojita graciosa, enanita remonona, mira, oye: si quieres que te quiera más que a mi vida y te obedezca como un perro, hazme un favor que voy a pedirte; tráeme nada más que una lagrimita de aquella gloria divina que tienes, de aquello que te recetó el médico para tu mal de barriga... Anda, ángel, mira que te lo pido con toda mi alma, porque esta penita que tengo aquí no se me quiere quitar, y parece que me voy a morir.

Sigamos hacia nuestro calvario dijo , sigamos con valor; apuremos la copa que Dios nos ofrece, y dominemos este corazón rebelde... que obedezca á su deber ó muera: que Dios no pueda acusarnos de haber dejado de combatir un solo momento. Se irguió, serenó su semblante, y se encaminó al lugar donde le esperaba el tío Manolillo. El bufón le salió al encuentro. ¿Ha venido? dijo el padre Aliaga.

Art. 3.º Trascurridas las seis horas, principiará el deterioro en la vía, cuya indemnización jamás podrá tener la empresa derecho a reclamar. El que sea católico español ante todo, obedezca mis órdenes, si es que ama a su patria y no desea sumergir en llanto y luto a su familia y a las de sus dependientes. Lo que comunico a Vd. para su conocimiento y demás exacto cumplimiento.

D. TELL. Si no tomo Venganza con propias manos... ¡Dar a Elvira! ¡Qué es a Elvira! ¡Matadlos!... Pero dejadlos; Que en villanos es afrenta Manchar el acero hidalgo. Vase. PELAYO. No le manche, por su vida. SANCHO. ¿Qué te parece? PELAYO. Que estamos Desterrados de Galicia. SANCHO. Pierdo el seso, imaginando Que éste no obedezca al Rey Por tener cuatro vasallos. Pues ¡vive Dios!...

Cruzáronse entre ellos algunas palabras fuertes, algunas frases agrias; pero al fin pudo el cariño más que ningún otro sentimiento, y Juan dijo: Mira, no añadamos a la pesadumbre que ya tenemos la pena de enfadarnos uno con otro. No hay remedio: si madre lo manda, uno tendrá que sacrificarse. Que ella lo designe, y ese que baje la cabeza, obedezca y se resigne sin chistar. ¿Convienes en ello?

La multitud de fenómenos, hechos y accidentes, que figure, han de adoptar una forma libre y artística, independiente de las reglas de Aristóteles; una forma, que deje al genio el mayor espacio posible, y, libertándolo de trabas convencionales, sólo obedezca á leyes inmutables, conformes con la naturaleza de las cosas, y con la idea fundamental del arte dramático.

Por eso nos permitimos recordar á los poderes constituídos que en Filipinas el comercio peninsular no tiene arraigo y la representación de nuestra raza es muy raquítica para poder neutralizar el incontrastable empuje del elemento asiático que allí impera, no sólo por el número, que ya hacen respetable los cien mil mestizos sangleyes que existen, sino por ser los principales acaparadores de la riqueza del país y encontrarse perfectamente organizados y con una unión que distan mucho de imitar nuestros compatriotas, por más que ésto obedezca á manejos que, si hoy no alcanzan á llamarse políticos, pudieran ser precursores de una hostilidad que en momento dado diese funestos resultados para la integridad de la patria, ocasionando desquiciamientos siempre dolorosos cuando no están justificados por las leyes naturales del progreso.

A no estar tan ciego el pobre don Juan hubiera notado que no era propio de situación tan grave hablar del ridículo don Quintín; mas sin pensar en ello, repuso: ¿ pedirme favores? Pon un bando, y hago que te obedezca... hasta el mismo Nuncio. No exageres. Lo que quiero es que no contribuyas a volver loco a ese pobre hombre.

Las obras de cada estilo tienen un mismo lenguaje; mas no hay una obra que en ese lenguaje no anuncie distintas ideas, no hay en ella elementos en que no esten consignados nuevos hechos. El arte está en un perpetuo movimiento: hoy no es lo que ayer, por mas que ayer y hoy obedezca á las mismas causas y no pueda apelar á otros recursos.

Mauricia dijo con varonil entereza la monja, soltando una expresión de su tierra , déjese usted de chínchirri-máncharras, y obedezca. Ya sabe usted que no nos asusta con sus botaratadas. Aquí no tenemos miedo a ninguna tarasca. Por compasión y caridad no la echamos a la calle, ya lo sabe usted... Vamos, hija, pocas palabras y a hacer lo que se le manda.