Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 14 de junio de 2025
El aullido continuó sonando a largos intervalos, y cada vez que su ronca estridencia cortaba el silencio, Febrer se estremecía de impaciencia y de cólera. «¡Cristo! ¿Iba a pasar así la noche, desvelado por esta serenata amenazadora?...»
Sí; eran bocas de flor que se abrían para decir a Feli que era muy bonita. Y yo continuaba con gravedad me adhiero a la sabia opinión de este mitin florido. La brisa de la tarde estremecía los árboles, y una nevada de pétalos caía sobre Feli, enredándose en su peinado.
El compartirse entre el compañero legal y el hombre amado era un tormento que no podía soportar su entusiasmo simple y vehemente. Cuando trotaba una noche por la rue de la Pompe mirando su reloj y temblando de impaciencia al no encontrar un automóvil ó un simple fiacre, le cortó el paso un hombre... ¡Esteban Laurier! Aún se estremecía de miedo al recordar esta hora trágica.
Cierto es que el cocinero mayor carecía de todo punto del valor suficiente para ponerse delante de Guzmán y decirle: Os voy á matar porque me habéis herido el alma. Montiño se estremecía de miedo al pensar solamente que podía verse en un lance singular con el sargento mayor. Pero Montiño tenía medios indirectos. El primer medio que se le ocurrió, fué el señor Gabriel Cornejo.
¡Y esa mujer era la que ahora iba a ser suya! ¡Qué mundo de sufrimientos, sin embargo; cuántos días de sorda desesperación, y cuántas noches de horripilantes fantasmas habían transcurrido entre aquel día y el presente! Roberto se estremecía; no quería pensar más en ello; ahora todo parecía arreglado.
Hubo momentos en que con el grande estrépito de arriba, parecía que retemblaba el techo de la sala, y que la pobre muerta se estremecía en su caja azul, y que las luces todas oscilaban, cual si, á su manera, quisieran dar á entender también que estaban algo peneques.
Era un manojo de nervios siempre vibrantes, y tenía tales ilusiones y rarezas que sus condiscípulos lo tenían por destornillado; pero su inteligencia fue vivísima y sutil, su cuerpo frágil se estremecía con las más delicadas emociones, y sus versos son de incomparable hermosura. Byron fue otro genio extraordinario y errante de la misma época de Shelley y de Keats.
Pimentó no podía retornar contra él, pero tenía amigos. Y dominado por súbito terror, echó á correr, buscando á través de los campos el camino que conducía á su barraca. La vega se estremecía de alarma. Los cuatro tiros en medio de la noche habían puesto en conmoción á todo el contorno.
Tenía un miedo tan grande a que se la pegara, como ella decía, que sólo con la idea se estremecía y empezaba a injuriarme. Después me pedía perdón, riendo de sí misma. Cerca de su casa había un establecimiento de bebidas, que solía estar abierto hasta hora muy avanzada.
Pero se dirigió a su casa, y en la puerta le recibió la Loca con cabriolas de gozo, olisqueando el hinchado pañuelo, que se estremecía con palpitaciones de vida. Toma, perdida dijo jadeante por el calor y el cansancio de la carrera ; aquí tienes tus granujas. Por esta vez pase, te lo perdono, porque eres un animal y no sabes cómo las gasta Pepe el carretero. Pero otra vez... ¡hum!... a la otra...
Palabra del Dia
Otros Mirando