United States or Ethiopia ? Vote for the TOP Country of the Week !


Dédalos son, no dedales nuestros blasones, pues todos saben volar en obsequio de nuestros reyes gloriosos. Para hacer á nuestros reyes obsequio que bien les venga, ha sido tan corto el tiempo que apenas está de prueba. En obsequio de unas bodas este gremio contribuye al ver de estas voluntades y coronas el pespunte.

La salsa picante de los franceses significa una cosa algo peor que el soñado puñal de la soñada Manola de Madrid; algo peor que la soñada mata y el soñado facineroso, de que nos habla el brillante y reluciente Alejandro Dumas; algo peor que las soñadas jícaras como dedales, en que toman el chocolate los españoles; peor tambien que la soñada señorita española, que como dice el mismo novelista, exclamaba cándida y apasionadamente: ¡mi amado toro!

El comedor era precioso, y la mesa magnífica; las vajillas y toda la loza de lo mejor que se ha fabricado para muñecas, y multitud de ramilletes esparcían su fragancia y mostraban sus colores en pequeños búcaros, en hueveras, y algunos en dedales. Pacorrito ocupó el asiento á la derecha de la Princesa. Empezaron á comer.

Algunas veces había encontrado en el caldo agujas de coser, hilos, dedales y hasta juguetes de niño. ¡Y pensar que otros del barrio, que sólo tenían casas de éstas, habían de alimentarse con tal bazofia, después de limpiarla como podían!... Ella la destinaba a sus cerdos. Por eso se los pagaban los tratantes de las afueras a más precio. Sólo los alimentaba con las sobras de los señores.

Y fueron viniendo botellas, aumentándose copas a la ya formidable batería que cada convidado tenía ante ; anchas y planas, como las de los relieves antiguos, para el espumante Champagne; verdes y angostas, finísimas, para el Rhin; cortas como dedales, sostenidas en breve pie, para el Málaga meridional.

Pero, sin dar tiempo de que se llevaran los «dedales de muñeca» a fray Anselmo o a la abadesa madame Montballon, desnudó la espada, tomó las dos copas con ambas manos, e intentó con ellas unos ejercicios como juegos malabares, dándolas muy pronto contra el suelo, donde se hicieron añicos.

No tenemos entre todas un cuarto dijo doña Clara , ¿y pedís veinte y dos maravedís? Andad, Contreras, que siempre fuistes impertinente. Una doncella de las presentes, viendo la esterilidad de la casa, dijo a Preciosa: Niña, ¿hará algo al caso que se haga la cruz con un dedal de plata? Antes respondió Preciosa se hacen las cruces mejores del mundo con dedales de plata, como sean muchos.

Aún cuando todo eso fuera verdad, aún cuando existiese en nuestro país una señorita que requebrase á un toro con el epiteto de amado, y matas que ocultaran facinerosos, y dedales que sirviesen de jícaras, y puñales que á manera de ligas, decorasen las medias de la Manola de Madrid; aún cuando realmente existiera ese enjambre de desatinos, esa porcion de sueños extravagantes y risibles de una imaginacion que tiene fiebre; pues, , señor Dumas, mi muy querido novelista señor Dumas; aún cuando todo eso existiese en España, creo que seria menos malo que lo otro que existe en Paris, menos malo tambien que la calentura que usted padece de decir, de contar poéticas graciosidades, á fin de embaucar á sus paisanos, para que le escuchen con la boca abierta, y aflojen los sueldos de la suscricioncilla.

Guy tomó las copas riéndose a mandíbula batiente... ¿Y a esto llamas vasos para beber vino de Borgoña, maese Manuel? ... señor... si el señor no se enfada... ¿Y crees que un francés honesto puede beber sangre de Cristo en estos dedales de muñeca? ... no...