Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 22 de junio de 2025


Después de la victoria alcanzada, hubiéramos sido muy felices teniendo aquí a mi hijo, y recibiendo a la prometida esposa que con mis primas debe de llegar aquí esta noche... ¿No ha llegado? Cuide usted, D. Paco, de que nada les falte. ¿Está todo preparado, las camas, la cena, las habitaciones? Niñas, ¿qué hacéis ahí mano sobre mano?

Salí de Manila y, a Dios gracias, hice una dichosa navegación. Tres días ha que estoy en Cádiz, bastante más fuerte ya. Pasado mañana salgo de aquí en el ferro-carril para esa villa. Expresiones cariñosas a los primos, primas, amigos y demás parientes, y a su huéspeda de V. la señorita doña Luz. Le quiere a V. mucho y desea abrazarle, su afectísimo sobrino».

Los bordados, las cestas de costura, rellenas de fastidiosas telas blancas de indiana y cotonía, pertenecían a Presentación; los libros, el altar con todo lo que en él había de místico e infantil, eran de Asunción; y los lujosos trajes y adornos eran de Inés, que los había bajado para que los viesen sus primas.

Entonces vamos a pasear: cuando llegue la hora, V. me lleva a casa y mamá se figura que me trajo el criado de las primas... Pero si le estorbo o no le gusta pasear conmigo, dígamelo V... me voy en seguida... Yo le contesté apretándole el brazo y tirándole suavemente por la mano para encajárselo bien en el mío. Teresa continuó hablando con graciosa volubilidad.

Donde quiera se ven grupos de obreros, almacenes de materias primas y fábricas bien montadas y en actividad, las mas importantes de tejidos de seda baratos, sencillos y que no carecen de elegancia, y de pañuelos de algodon y otras telas, de colores vivos y populares.

Como no hubiera ido a casa del fotógrafo, es difícil... Voy a enseñártelos ahora mismo: verás también los de nuestros parientes de Sevilla... Tengo unas primas muy guapas: a ver si te conviene alguna. Y salió corriendo de la sala. ¡Qué chiquilla tan viva! exclamo Miguel volviéndose a su madrastra. , muy viva y muy insufrible repuso ésta con mal humor.

Esta juventud, con la cabeza descubierta, la cabellera partida en dos crenchas negras, abultadas, lustrosas, impermeables, que ningún huracán podía alterar ni conmover, y el menudo pie encerrado en botines de charol de alto empeine y vistosa caña, siempre que salía del fumadero volvía los ojos con cierto temor hacia el «rincón de los pingüinos». Allí estaban sus madres y parientas y las respetables amigas de sus familias; pero antes la fuga que dejarse atrapar por una cariñosa llamada y sufrir media hora de conversación en tan noble compañía. «¡Viejas pesadas! ¡Señoras macaneadoras!...» Y esperaban a que pasasen las primas o las futuras novias para unirse a ellas y atraerlas dulcemente hacia la popa o la banda de estribor, donde reían y saltaban como escolares en libertad.

Alcaparrón hablaba con cierto orgullo de sus primas, pero lamentando de paso la diversa suerte de familia. ¡Ellas hechas unas reinas y él con su pobre mare, sus hermanos pequeños, y Mari-Cruz, su pobrecita prima, siempre enferma, ganando dos reales en el cortijo! ¡y muchas gracias que les daban trabajo todos los años sabiendo que eran buenos!... Sus primas eran unas descastás que no escribían a la familia, que no la enviaban ni esto.

Y Alcaparrón continuaba sus lamentaciones. ¡Si no hubiese muerto el pobrecito! En lugar de sus primas estarían él y sus hermanos disfrutando tantas riquezas.

Sttt.... Poquito a poco.... Me lo iréis repitiendo conforme os abrace. Dos primas vinieron a pagar el tributo, diciendo festivamente: Yo soy Manolita, para servir a usted. Yo, Carmen, para lo que usted guste mandar.

Palabra del Dia

vorsado

Otros Mirando