Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 4 de mayo de 2025


Yo digo que maestros de hierro que no usen palmeta, sino fusil Remington. Pero qué, ¿se lo llevan ya? No está muerto; pero parece grave. ¡Golpe más bien dado! murmuró un chulo . Ese chico es de buten. ¡Vaya, que la madre que parió tal patíbulo! apuntó una de estas que llaman del partido.

Esta orden es acogida afuera con otro coro de relinchos, y al punto comienzan á cantar los marzantes, en un tono triste y siempre igual, un larguísimo romance que empieza: «En Belén está la Virgen que en un pesebre parió; parió un niño como un oro relumbrante como un sol....» y concluye: «Á los de esta casa Dios les victoria, en la tierra gracia y en el cielo gloria

Al ponérselo ¡cómo se reía el buen cura!... Salvador le regaló un cinto con dos pistolas que no necesitaba. Cuando se vio con tales arreos el capellán, a quien ya no conocería ni la Iglesia su madre ni la madre que le parió, soltó tan gran carcajada, que las gentes salían al camino para verle. El mismo Salvador, que había asistido a su lenta trasformación, casi no le reconocía bien. Sr.

Dice así: «Ya ven vuessas mercedes, que los reyes Aguardan allá dentro, y no es posible Entrar todos á ver la gran comedia Que mi autor representa, que alabardas Y lancineques, y frinfrón impiden La entrada á toda gente mosquetera: Mañana en el teatro se hará una, Donde por poco precio verán todos Desde el principio al fin toda la traza, Y verán que no acaba en casamiento, Cosa común y vista cien mil veces, Ni que parió la dama esta jornada, Y en otra tiene el niño ya sus barbas, Y es valiente y feroz, y mata y hiende, Y venga de sus padres cierta injuria, Y al fin viene á ser rey de un cierto reino.

¿Aún te ríes, hijo de perra? ¡Mardito seas, guasón! ¡Mardita la vaca que te parió y el ladrón de tu amo que te dio hierba en la dehesa! ¡Ojalá esté en presidio!... ¿Aún te ríes? ¿aún me haces muecas? A impulsos de su rabia, tendió el busto sobre la mesa, avanzando los brazos y abriendo los cajones. Después se irguió, levantando una mano hacia el cornudo testuz.

Lo peor sería que rompiese a llorar la niña... Pero en último caso... ¿qué podía suceder? ¿Qué se supiera todo? Pues no le faltarían casas... Cuando sus amos volvieron, la oyeron cantar desde la escalera: ¿Quién sería la madre que parió a Judas? ¡Qué hijos tan indinos paren algunas!

Del gran Mercurio la cabal persona Sobre seis rezmas de papel sentada Iba con cetro y con real corona: Quando una nube, al parecer preñada, Parió quatro poetas en crugia, O los llovió, razon mas concertada. Fue el uno aquel, de quien Apolo fia Su honra, JUAN LUIS DE CASANATE, Poeta insigne de mayor quantía.

Quedaban dos pajes cerca de la bitácora velando la ampolleta, un reloj de arena que molía dejaba pasar su contenido en media hora. Así medían el tiempo en la obscuridad de la noche. Y siguiendo una tradición, decían los pajes al entrar de guardia: Bendita la hora en que Dios nació, Santa María que lo parió, San Juan que lo bautizó.

Aun vuestra merced menos mal, pues tuvo en sus manos aquella incomparable fermosura que ha dicho, pero yo, ¿qué tuve sino los mayores porrazos que pienso recebir en toda mi vida? ¡Desdichado de y de la madre que me parió, que ni soy caballero andante, ni lo pienso ser jamás, y de todas las malandanzas me cabe la mayor parte! -Luego, ¿también estás aporreado? -respondió don Quijote.

Don Feliciano y él conferenciaron en un rincón breves momentos. Acto continuo salieron a la calle. Don Rudesindo quedó en la apariencia tranquilo, en realidad fuertemente alterado y bramando en su interior contra Peña, contra el Saloncillo, contra mismo y contra la madre que le parió. ¿Qué necesidad tenía él de meterse en líos?

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando