Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 13 de mayo de 2025
Corte á poco de los emires que gobernaban la España en nombre de los califas de Damasco, no tardó en recibir animacion y vida de las gloriosas espediciones militares dirigidas contra las fronteras de las Galias; mas no tardó tampoco en estar amenazada por esas funestas guerras de tribu á tribu que socavaron desde un principio los cimientos de este nuevo imperio sujeto á las banderas del Profeta.
El pradillo frente á la cárcel, del cual hemos hecho mención, se hallaba ocupado hace unos doscientos años, en una mañana de verano, por un gran número de habitantes de Boston, todos con las miradas dirigidas á la puerta de madera de roble con puntas de hierro.
Las gentes distinguidas dejaron de mirar al Hombre-Montaña para fijarse en el gran poeta, y esto hizo que Golbasto creyese necesario murmurar algunas palabras, como si fueran dirigidas á ella misma, para corresponder al homenaje mudo de sus admiradores.
No es cierto. Las cartas dirigidas a usted por sus correligionarios de Rusia y de Inglaterra lo acusan de haberlos traicionado. Por tercera vez fijó el acusado su mirada en la cara del juez, y se estremeció. Tenía que ayudar a otros. ¿Cree usted que yo le voy a revelar secretos que no son míos? ¿Quiere usted aprovechar mi prisión para instruir un proceso político? ¡No, no!
Pon atención a lo que le diga y haz cuenta de que te lo digo a ti. Habla tú con tu hermano y procura contestarme con palabras dirigidas a él...». »Teníamos además mil señales. Tú eras tan buena que te conformaste con tu papel. Ojalá no hubieras sido tan condescendiente.
Clara, llena de horror y de ansiosa curiosidad á la vez, oía á su madre y pugnaba por comprender todo él arcano tremendo. Al sonar las últimas palabras, que iban dirigidas á ella, se cubrió Clara el rostro con ambas manos. Bien puedes estar satisfecha continuó Doña Blanca. Te tenía olvidada; pero al cabo se acordó de tí é hizo un gran sacrificio.
Abrió su escritorio, buscó en un cajón y sacó cinco ó seis pliegos de papel, doblados. Eran las cartas dirigidas por Héctor á Herminia y que ésta había entregado á la señorita Guichard sin leerlas: cartas insignificantes de un buen muchacho á una prima á quien quiere inflamar y que no salían del nivel de la medianía en achaque de amplificaciones sentimentales.
No pretenderé averiguar si las líneas dirigidas a Flavia las habían dictado el afecto o el odio, la compasión o los celos: pero nos fueron también de gran servicio. Cuando el Duque fue a Zenda ella le acompañó; y allí pudo comprender por primera vez la crueldad de Miguel en toda su extensión y se apiadó su alma del desgraciado Rey. Desde aquel instante estuvo de nuestra parte.
Una de las muchas flechas dirigidas contra el Hombre-Montaña, al clavarse en el paño de la chaqueta, la había alcanzado con su punta. Ra-Ra trepó inmediatamente á la abertura para advertir al gigante; pero éste, en vez de escucharle, lo golpeó con uno de sus dedos, haciéndole caer de nuevo sobre el cuerpo de la joven herida.
Poco a poco fue dibujándose en su rostro un gesto de inexpresable amargura, luego dobló la cabeza sobre el pecho, y enseguida, enderezando a Dios el pensamiento, dijo mentalmente de este modo, no con palabras aprendidas de memoria, sino con aquellas espontáneas y sinceras razones que, inspiradas en verdadera piedad, no pueden menos de llegar a dónde van dirigidas: «¡Un día más... y un día menos!
Palabra del Dia
Otros Mirando