Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 17 de junio de 2025
17 Y comieron todos, y se saciaron; y alzaron lo que les sobró, doce cestos de pedazos. 18 Y aconteció que estando él solo orando, estaban con él los discípulos; y les preguntó diciendo: ¿Quién dice el pueblo que soy? 19 Y ellos respondieron, y dijeron: Juan el Bautista; y otros, Elías; y otros, que algún profeta de los antiguos ha resucitado. 20 Y les dijo: ¿Y vosotros, quién decís que soy?
¡Avergonzada! ¿y por qué? ¡Porque soy una mujer perdida! dijo la Dorotea , y se cubrió el rostro con las manos. ¿Pero quién ha dicho eso? replicó Montiño acercándose á ella y apartándole suavemente las manos de sobre el rostro. Lo digo yo. Pues decís mal, señora; yo os creo una mujer virgen. ¡Ah, explicadme... explicadme eso!
¿Qué dices, hermano? -dijo el cura, dejando de leer lo que de la novela quedaba-. ¿Estáis en vos, Sancho? ¿Cómo diablos puede ser eso que decís, estando el gigante dos mil leguas de aquí? En esto, oyeron un gran ruido en el aposento, y que don Quijote decía a voces: ¡Tente, ladrón, malandrín, follón, que aquí te tengo, y no te ha de valer tu cimitarra!
Decís bien, exclamó doña Guiomar, en lo de vuestra enemiga contra los calvos, que yo tengo para mí, que, como decís vos, la gran parte de las veces lo que la calvicie causa es el fuego de los malos y perversos pensamientos que en la cabeza arden, y queman la raíz de los cabellos y los mata.
LEONOR. Estoy resuelta; ya no hay felicidad, ni la quiero, en el mundo para mí; sólo morir apetezco. Acompáñame, Jimena. JIMENA. Estás temblando. LEONOR. Sí; tiemblo porque a ofender voy a Dios con pérfido juramento. JIMENA. ¿Qué decís? LEONOR. ¡Ay! Todavía delante de mí le tengo, y Dios, y el altar, y el mundo olvido cuando le veo.
La providencia de Dios, en la forma de un joven. ¡Ah! ¡Diablo! ¿Nos ha sacado ese joven ó nos saca de alguno de nuestros atolladeros? Como que ha herido ó muerto á don Rodrigo Calderón... Mirad lo que decís, amigo mío; cuenta no soñéis. ¿Qué es soñar? he aquí la prueba. Y el padre Aliaga fué á la mesa en busca de la carta de la reina...
12 Uno es el dador de la Ley, que puede salvar y perder, ¿quién eres tú que juzgas a otro? 13 Ea ahora, los que decís: Vamos hoy y mañana a tal ciudad, y estaremos allá un año y compraremos mercadería, y ganaremos; 14 y no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es un vapor que se aparece por un poco de tiempo, y después se desvanece.
Haced lo que os plazca le dijo; pero cuidad que vuestra inadvertida juventud no os enderece por donde tal vez no queréis caminar. Don Diego será, como decís, harto infanzón, aun que de cepa gabacha y no española, sea dicho de paso; pero lo cierto es que ha sido agora traidor y aleve con su Rey.
-Yo no os entiendo, marido -replicó Teresa-: haced lo que quisiéredes, y no me quebréis más la cabeza con vuestras arengas y retóricas. Y si estáis revuelto en hacer lo que decís... -Resuelto has de decir, mujer -dijo Sancho-, y no revuelto.
No ha de ser aquí donde yo os oiga, dijo doña Guiomar, y donde a esa sinventura deje; que ya que vos decís, y yo quiero creerlo, que como hidalgo y cristiano la habéis amparado, ampararla quiero yo, que mejor podré hacerlo y más honestamente, dado que mujer soy y viuda.
Palabra del Dia
Otros Mirando