Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 25 de junio de 2025


Aquel que has visto alli del cuello erguido, Lozano, rozagante y de buen talle, De honestidad y de valor vestido: Es el DOTOR DON FRANCISCO SANCHEZ: dalle Puede qual debe Apolo la alabanza, Que pueda sobre el cielo levantalle. Y aun mas su famoso ingenio alcanza, Pues en las verdes hojas de sus dias Nos de santos frutos esperanza.

Pero, a la verdad, la bahía de Nueva York sorprende gratamente al que pisa el suelo de la gran nación americana con el espíritu dispuesto sólo a la contemplación del lado positivo de la vida humana, a los espectáculos estupendos de la industria, y no a las bellezas naturales... Todo nuevo, todo fresco y rozagante.

Es una crueldad dijo con mucha calma sacar a las tablas a una criatura que no puede tenerse en pie. ¡Pero qué!, señora exclamó el director , ¿estáis enferma? ¿Desde cuándo? ¡Hace un momento que os he visto tan rozagante, tan alegre, tan animada! María iba a responder, pero bajó los ojos y no despegó los labios.

Nació gimiendo; entre gruñidos y pataleos recibió el agua del bautismo, y gruñendo volvió a casa y continuó, sin cesar, muchos días, comiéndose los puños apretados y perneando rabioso, como sapo clavado en estaca, mientras la pacífica y rozagante Verónica, olvidada de su familia en el último confín del hogar, no se moría de hambre porque la niñera cuidaba, de propio impulso, de esos y otros menesteres.

Esta que es la poesia verdadera, La grave, la discreta, la elegante, Dixo Mercurio, la alta y la sincera, Siempre con vestidura rozagante Se muestra en qualquier acto que se halla, Quando á su profesion es importante. Nunca se inclina, ó sirve á la canalla Trobadora, maligna y trafalmeja, Que en lo que mas ignora, menos calla.

Montañas y valles permanecen velados durante algunas semanas, y sólo de cuando en cuando, de mañanita, asoma el sol su rostro paliducho a través de las gasas, como para decir a los villaverdinos que no ha muerto, que ya le tendrán, el mejor día, muy guapo y rozagante.

A todo esto, ella me miraba de hito en hito; hasta que, sin llegar yo a decirla cuanto pensaba decir, bañó toda su faz noblota y rozagante en una sonrisa que pudiera llamarse inmensa, si se midieran las sonrisas como las superficies; arrancó hacia con ambas manos tendidas, y exclamó cortándome el descosido discurso de repente: ¡Virgen la mi Madre! Usté es el sobrino de don Celso.

Entregarme con toda el alma a esta pasión noble, fuerte.... ¡Ana, Ana y nada más en el mundo! Ella también está sola, ella también me necesita.... Los dos juntos bastamos para vencer a todos estos necios y malvados». Pálido, casi amarillo, agitado, muy nervioso, llegaba De Pas al lado de su amiga mística, cada vez más hermosa, de nuevo fresca y rozagante, de formas llenas, fuertes y armoniosas.

Alegre, rozagante, como nuevo volvió de los baños de Termasaltas el señor Arcediano don Restituto Mourelo, dispuesto a emprender otra campaña, que esperaba fuese la última y decisiva, «contra el despotismo del simoníaco y lascivo y sórdido enemigo de la Iglesia que, apoderado del ánimo del señor Obispo, tenía sojuzgada a la diócesis». Con esta perífrasis aludía al señor Provisor el diplomático Glocester.

Artemisa la del Casal, moza blanca y rubia, briosa y rozagante, con manteo cercado de velludo y capotillo mariñán, acaba de aparecer en el umbral de la antesala. Se la tiene por hija bastarda del Caballero. Trae de la mano a un niño de ojos picarescos, que se tambalea sobre los zuecos blancos, que muestran no haber pisado la tierra.

Palabra del Dia

rigoleto

Otros Mirando