United States or Cayman Islands ? Vote for the TOP Country of the Week !


La policía se alarma, inquiere qué noticia tan fausta se ha recibido que ella ignora, sin embargo... ¡Y éste era el pueblo que rendía a 11.000 ingleses en las calles y mandaba después cinco ejércitos por el continente americano a caza de españoles! Es que el terror es una enfermedad del ánimo que aqueja a las poblaciones, como el cólera morbo, la viruela, la escarlatina.

D. Luis, cuando Pepita se le rendía, tuvo pues que imitar a Booz y exclamar: Hija, bendita seas del Señor, que has excedido tu primera bondad con ésta de ahora. Así se disculpaba D. Luis de no haber imitado a San Vicente y a otros santos no menos ariscos. En cuanto al mal éxito que tuvo la proyectada imitación de San Eduardo, también trataba de cohonestarle y disculparle.

Pues entonces como si no se hubiera dado. Núñez asentía gravemente, un poco amoscado y mirando de reojo a su futura cuñada. Pero ésta no se rendía a demostraciones tan evidentes y se obstinaba en pedir, cada vez con mayor violencia y más altas voces, un poco de vergüenza para su hermana menor y unas migajitas de sentido para su señor padre.

En lugar de proceder en la forma indicada, Estenoz, que no era después de todo más que un pobre diablo, se encontró convertido de la noche á la mañana, y sin que él mismo, tal vez, pudiera explicarse la metamorfosis, en todo un personaje ilustre, al que se rendía la innoble pleitesía del miedo, y el resultado fué que él y los suyos, al darse cuenta de que se les temía, cobrasen nuevos bríos y se mostraran cada vez más audaces y decididos, hasta el extremo de no ocultarse ya para conspirar contra los blancos, es decir, contra la inmensa mayoría de los habitantes de la isla.

¡Hermosa tarde! ¡Quién pudiera trasladar al papel el espléndido cuadro que tenemos delante! Usted está triste... ¿por qué? Nosotras deseamos verle contento. ¿A qué ese rostro abatido y melancólico? Papá nos ha dicho que ha sufrido usted mucho.... Ciertamente, me rendía la tristeza.

De este defecto adolecen y han adolecido siempre en España los particulares y el Estado. En tiempo de Felipe II, cuando estábamos en la cumbre de la prosperidad, cuando dominábamos y despojábamos tantas regiones, cuando La tierra sus mineros nos rendía, Sus perlas y coral el Océano;

Cuando se ofrecían al español, en animado cuadro, las hazañas de sus antepasados, y las épocas más brillantes de su grandiosa historia; cuando se rendía homenaje en su presencia á la gloria perenne de su nación, y esto exornado con el más bello colorido; cuando las imágenes más maravillosas y más conocidas de un mundo de tradiciones románticas se mostraban á sus ojos como si realmente existieran, y veía reflejarse en el espejo mágico de la poesía las variadas manifestaciones exteriores, que lo cercaban por do quier, ¿era posible que no lo prefiriese á todos los demás placeres?

Cuando veía fracasar a un compañero en alguna, sonreía maliciosamente y se daba a mismo el parabién por el gran talento de que estaba dotado. Si rendía ganancias, sacudía la cabeza murmurando con implacable pesimismo: "Al freir será el reir". Económico, avaro mejor dicho, hasta un grado escandaloso en su casa.

El señor maestro de Entralgo tiene gran cabeza y ha aprendido mucho por los libros, pero es un carnero, Felicia, no lo dudes, es un carnero al par de los maestros de Gijón ó de Oviedo. La tía Felicia rendía al cabo su juicio débil ante el poderoso de aquel hombre superior, pero no lograba consuelo sino con las cartas que de vez en cuando recibía de su hija. No eran muy frecuentes.

Sólo me rendía ante el piano eterno que pasaba a mi lado sobre el hombro dolorido de diez indios jadeantes. Arriba, pues.