Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 3 de junio de 2025


¡Ah! ¡no! ¡no! exclamó don Juan. Y vos, doña Clara; vos, cuya fama brilla pura y resplandeciente como el sol; vos, hija mía, vos tan hermosa, que no hay hermosura que os iguale en la corte; vos tan noble como yo y como su padre; vos pretendida por tantos ilustres caballeros, y tan insensible con todos, vos casada con don Juan, enamorada... porque no tenéis que decírmelo... la felicidad brilla en vuestros ojos... enamorada con toda vuestra alma de vuestro esposo, sin duda seríais más feliz si vuestro esposo no fuera mi hijo.

Su gran pasión disculpaba a los ojos de Bonis aquellas relaciones ilícitas con la cómica; pero desde el momento en que él faltaba a Serafina, dejándose interesar endiabladamente por los encantos marchitos, pero expresivos y melancólicos, llenos de fuego reconcentrado, de su legítima esposa, quedaba probado que la gran pasión pretendida no era tan grande, y, en otro tanto, era menos disculpable.

Puesto que Lea Peralli está viva y anda por esos mundos con el nombre de Jenny Hawkins, después de haberse hecho llamar durante algún tiempo Juana Baud, es que ésta estaba muerta. La mujer de la calle Marbeuf, tu pretendida víctima no era otra que Juana Baud. ¡Pero es imposible! dijo Jacobo. Es cierto, contestó Cristián.

Y aplicando este modo de proceder de su casa a la ajena y de su hermana a su pretendida novia, no consiente tampoco que nadie se acerque a doña Marcela, ni le diga chicoleos, celándola de suerte, que ella vive aislada, porque Currito tiene metidos en un puño a casi todos los mozos del lugar.

Cuando forman el proyecto de buscar esposa, mandan á uno de sus amigos de más representación á casa de la novia para solicitarla del padre ó pariente, el cual, oído el parecer de la pretendida y siendo favorable, contesta desde luego que puede ir el novio por ella.

Acompaña á su pretendida á todas partes, desempeña sus quehaceres, pila por ella el arroz, lampacea el suelo, limpia los carajais y los platos, ayuda al padre en las faenas de las sementeras, y todo por ella, por ella, á quien mira con una cómica gravedad. No hay nada más digno de notar, que la respetuosidad con que es tratada una india en situación de pretendida.

Complícase más la acción con las persecuciones amorosas, que sufre la bella sirvienta, de otros muchos huéspedes de la posada, y, por último, viene el antiguo amante de la pretendida hermana de Florencio, que intenta suplantar á su rival. Lisena se da trazas de hacer creer á todos que les ayudará poderosamente á realizar sus deseos.

Mi novia, es decir, mi pretendida, era una niña encantadora llamada Clarita. Conmovida por mis miradas incendiarias, me ofreció su casa, y su madre me invitó a comer. Mi nave iba viento en popa... Durante la comida dije a la niña muchas ternezas.

Al poco tiempo, don Mariano apremió a su pretendida: Debe contestarme usted pronto, Coca... ¡Esto se va haciendo inaguantable!... Hace ya dos semanas que usted me tiene en la duda y la incertidumbre... Muy formal, respondió Coca: ¿Dos semanas?... Espere siquiera a que se cumplan... Apenas han pasado doce días desde que usted me habló. He contado muy bien, ¡doce días!

Y mientras yo me moría de dolor y de ignorancia, la pretendida víctima huía y se burlaba de la justicia y de la inocencia y se regocijaba con su cómplice por haber llegado á tan dichoso desenlace... Yo, con la cabeza llena de tinieblas, sometido á unos jueces que me tomaban por un malvado endurecido, á unos abogados que me encontraban estúpido porque callaba cuando era preciso defenderme, á unos guardianes que se mofaban de mi, á una prensa moralizadora que me arrastraba por el fango, á mi falta de conocimiento, que hasta me incitaba á creer en un crimen, fui á dar en Numea, entre bandidos y bajo un cielo de fuego.

Palabra del Dia

ayudantes

Otros Mirando