Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 2 de julio de 2025


Viejo, hombre todavía por lo menos una vez en tu vida. ¡Es preciso que la salves, es preciso, es preciso, es preciso! Y tan ligero como sus piernas cascadas podían llevarlo, se precipitó empujando a su paso a la ama de llaves que escuchaba en la puerta y echó a andar por la escarcha helada y punzante de la mañana de invierno.

Vamos al pueblo dijo Ugarte a ver si encontramos algo que comer. El cielo estaba despejado y lleno de estrellas; los charcos, helados; el suelo, endurecido por la escarcha. El viento frío soplaba con fuerza. Nos acercamos a la aldea. Era ésta de pocas casas. Los perros ladraban en el silencio de la noche. Pasamos por delante de una casita pobre con dos ventanas iluminadas.

Mucho antes de ver el círculo polar, una fría niebla pesa sobre el mar, os resfría, os cubre de escarcha. Los cordajes se atiesan: inmovilízanse las velas; la cubierta pónese resbaladiza con el agua-nieve; la maniobra se hace difícil. Apenas se distinguen en tan solemne momento los temibles escollos movibles.

El día asomaba despejado y magnífico: en las hierbas resplandecían las cristalizaciones de la escarcha; la tierra se estremecía de frío y humeaba levemente a la primera caricia del sol; el paso animado y gimnástico de los cazadores resonaba militarmente sobre el terreno endurecido por la helada. Desde el cazadero, adonde llegaron a cosa de las nueve, desparramáronse por el monte.

Al sentarse á la mesa, al contemplar su mullido lecho, al percibir en invierno la tibia caricia de la calefacción, viendo los cristales floreados por la escarcha, creía estar usurpando indignamente algo que era de otro. ¡Su hijo! ¡su pobre hijo viviendo como un perro sin dueño, tendido en la paja, atenaceado por el tormento del hambre! ¡Haber producido un ser ella que se creyó durante años y años el centro de lo existente, disfrutando de todas las comodidades , y este pedazo de su vida agonizaba bajo el suplicio de una miseria como sólo la conocen los mayores abandonados!... Nunca pudo imaginarse que la suerte le reservase esta ironía.

Este sitio solitario, bastante alejado del castillo, era el lugar que había escogido yo para mis meditaciones. Me detuve junto al puente cargado de escarcha, a pensar en el porvenir y a admirar los enormes copos de nieve, pendientes de la cascada al ser sorprendidos en su líquido curso por el hielo.

Con la ardiente cabeza pegada a los cristales helados, contemplaba con vista turbada aquella triste decoración de invierno: los tilos desnudos, de torcidas ramas y espolvoreados de escarcha, la fuente helada, cuyo delgado chorro, congelado como una estalactita, no dejaba ya oír su murmullo cristalino, la plazuela alfombrada de nieve en la que unos pajarillos hambrientos ponían pequeñas manchas negras, como los cuervos de pesado vuelo en la inmensidad blanca de los cielos.

Pero os pido y os ruego que dejéis de tejer el domingo; eso es malo para el alma y para el cuerpo. El dinero que se consigue así es un mal lecho de reposo en los últimos momentos, si no se disipa como la escarcha quién sabe dónde. Disculpad que me haya tomado esta libertad con vos, maese Marner, porque os quiero bien en verdad. Aarón, haced vuestra reverencia.

A los años que usted tiene y en un alma como la suya cada día hay algo nuevo. ¿Recuerda la época en que medía usted las hojas que nacían y me comunicaba el número de líneas que habían crecido bajo la acción de una noche de escarcha o un día de sol fuerte? Pues lo mismo sucede con los instantes de un mozo de su edad.

Es una cosa sumamente graciosa que todos los maridos crean que sus mujeres son de escarcha... ¡Pero nosotras sabemos que son todo lo contrario para sus amantes! Y continuó arrojando bocanadas de humo de su cigarrillo por entre sus labios rosados. Está completamente ebria dijo uno de los convidados a Maurescamp. Y es lástima, pues sin eso sería perfecta.

Palabra del Dia

gallardísimo

Otros Mirando