United States or Nicaragua ? Vote for the TOP Country of the Week !


Pero teniendo que mascar la torta por la mañana y las rosquillas por la tarde y ponerse el chaleco floreado y la montera de los días de fiesta, no parece bien llevar las espaldas rameadas de vardascazos. , Quino, ¿cómo te vas á presentar delante de Telva con un chichón en la frente? Y Bartolo, ¿con qué garbo vas á bailar en la romería si te dejan más derrengado de lo que estás?

No dormía; no comía. Coma algo, siquiera un huevo pasado por agua le decía Telva, la sirvienta . Mire que ya está demasiado flaca, y si no come, los huesos le agujerearán la piel. Ojalá me la agujereen como criba y el alma se me salga como trigo pasado. ¿Para qué quiero el alma en el cuerpo? ¿Para qué me ha servido? ¿Quién ha querido comprarla, como buena simiente?

Decidióse, pues, á hablar con el tío Pepón. Para efectuarlo se colocó á su lado mientras pisaban la manzana. En un momento de descanso le dirigió estas palabras afectando ruda franqueza: ¿Entonces, tío Pepe, me da usted á Telva ó no me la da?

Quino se acerca á Telva y con frase insinuante la requiebra y la felicita. Arrimados á una columna del pórtico departen en voz baja mientras Eladia, con la muerte en el alma, les dirige miradas fulgurantes. Pero Flora, la gentil zagala de Lorio, se acerca á ella y procura distraer su pena con su charla siempre alegre y graciosa. Deja que me esconda detrás de ti. Jacinto me persigue y me sofoca.

Los ojos una vez posados sobre él, no querían apartarse. Pero ¿quién es su pareja? ¿Quién ha de ser? ¡Telva, Telva de Canzana, que orgullosa de su triunfo no le cae la sonrisa de la boca, mientras su afligida rival, la pobre Eladia, se mantiene oculta en el rincón más oscuro de la plazuela! En torno del baile se había agrupado mucha gente.

Quino había festejado por mucho tiempo á aquella joven, su vecina, y aún seguía festejándola con intermitencias; pero su corazón inconstante volando hacia cuantas bellas acertaba á encontrar le causaba mil tormentos. Ultimamente se había prendado de una niña de Canzana, llamada Telva, y por ella la tenía casi olvidada. El dardo de Regalado la había herido, pues, en lo más vivo.

Llegado el momento de pisarla, Regalado envía recado á Nolo de la Braña y Jacinto de Fresnedo, hijos de sus primos Pacho y Telesforo, avisa á algunos inteligentes labradores de Canzana, entre ellos al tío Pepón, padre de la hermosa Telva, que ya conocemos, y ayudado de Quino, Bartolo y otros mozos de Entralgo se comienza solemnemente la fabricación de la sidra.

Es pronto aún para misa de alba. Felicita no la oyó. Telva insistía. Felicita dijo, como hablando para : Anselmo está agonizando. Llegaron a la fonda del Comercio. Estaba abierta y había un camarero de guardia. Don Anselmo se muere dijo Felicita. , señora, espicha sin remedio respondió el camarero. Voy a su habitación. Enséñeme el camino ordenó Felicita.

Telva no quiso disturbarle el sueño, y la dejó a solas, rezongando: «Cuando despierte, ya se meterá en la cama. ¡Jesús con el señorío, y qué afición a los pantalones!...» Felicita despertó de madrugada. Por el balcón se efundía una claridad lívida e inanimada, como aurora de ultratumba. Las velas sobre la cómoda se habían consumido.

Porque vino Telva, la de la Cuesta, con un celemín, diciendo que no tenían qué comer en casa hoy... Tanto me rogó que se lo eché... Esta noche se puede moler el del tío Ángel. ¿Y a ti quién te mete a hacer favores a Telva sin permiso mío? Como otras veces lo hice y no me dijo nada, yo pensé... ¡Pensaste! ¡pensaste!... Pues para que no pienses otra vez, toma...