United States or Hong Kong ? Vote for the TOP Country of the Week !


Más estético y más simétrico hubiera sido que las lágrimas fueran dos; pero no fue más que una; la del otro ojo debió de brotar tan pequeña, que la sequedad de aquellos párpados, siempre enjutos, la tragó antes que asomara.

No te guardo rencor, puesto que tuviste interés en obrar de ese modo. ¿Pero me conocía también Jenny Hawkins? ¿Por qué? En el momento en que se cerró la puerta, dijiste en voz baja: "¡Cuidado! ¡Tragomer!..." Sorege frunció imperceptiblemente las cejas. Acaso se sentía algo rudamente apurado y empezaba á ponerse de mal humor. Con cierta sequedad respondió. ¿Oíste? ¡Ladino! Tienes buen oído.

¡Pronto! dijo con sequedad el viejo, sentándose y tomando una carta que había sobre la mesa. La leyó; después tomó su capa y su sombrero, y dijo á las chicas: Voy á salir; tengo que hacer: no volveré en toda la tarde. Mi sobrino llegará esta noche á eso de las ocho: yo no vendré hasta las diez lo más temprano. Que me espere aquí.

Cuando se vio sola delante del espejo en su tocador, se le figuró que la Ana de enfrente le pedía cuentas; y formulando su pensamiento en períodos completos dentro del cerebro, se dijo: «Bueno, voy; pero es claro que si voy me comprometo con mi honra a no dejar que ese hombre adquiera sobre derecho alguno; no lo que pasará allí, no hasta qué punto alcanza este aliento de libertad que ha venido de repente a inundar la sequedad de dentro; pero el ir yo al teatro es prueba de que allí no ha de haber pacto alguno que ofenda al decoro; no saldré de allí con menos honor que tengo».

11 Y ella tuvo varas fuertes para cetros de señores; y se levantó su estatura por encima entre las ramas, y fue vista en su altura, y con la multitud de sus sarmientos. 13 Y ahora está plantada en el desierto, en tierra de sequedad y de aridez. 14 Y salió fuego de la vara de sus ramas, que consumió su fruto, y no quedó en ella vara fuerte, cetro para enseñorear.

¿Ahí está el señor Florimorte? -replicó el cura-. Pues a fe que ha de parar presto en el corral, a pesar de su estraño nacimiento y sonadas aventuras; que no da lugar a otra cosa la dureza y sequedad de su estilo. Al corral con él y con esotro, señora ama. -Que me place, señor mío -respondía ella; y con mucha alegría ejecutaba lo que le era mandado.

El dolor de cuanto respira, el padecer de cuanto alienta, la muerte de cuanto vive y el espantoso espectáculo de la miseria humana acibararían nuestra ventura, o nos harían indignos de gozarla por la dureza de nuestros pechos sin compasión y por la sequedad de nuestros ojos sin lágrimas. GOPA. Tus razones son tan poderosas para , que no cómo responder a ellas.

En una de aquellas vueltas se encaró con él, se detuvo y le dijo, con una sequedad a que no tenía acostumbrado al excelente farmacéutico de Villavieja: Pero ¿qué hace usted ahí? Esperando, señor don Alejandro contestó el pobre hombre con la voz como un hilo , a que me usted su licencia. Según mis noticias replicó Bermúdez sin ablandarse más , esa licencia la traía usted ya desde su casa.

Mientras que la sequedad de la duda que se introduce en esa tierna naturaleza substituye a la cándida fe que es su fuerza y su gracia... Y Lacante levantó las manos y las dejó caer, como si viese ya pulverizado todo el edificio de fuerza mística.

Aquí, en don Feliciano prosiguió el ingeniero con la misma sonrisa tiene usted un defensor acérrimo. Si me defiende es que alguien me ha atacado respondió don Rosendo con más sequedad aún. Nadie pronunció una palabra. El silencio se prolongó bastante tiempo, hasta que lo rompió el mismo Belinchón haciendo una pregunta indiferente a don Jaime, con lo cual la conversación volvió a animarse.