Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 10 de mayo de 2025
Señorita... le dijo el desconocido en tono grave, pero respetuoso. Y al ver que la tía aún permanecía allí, le hizo seña de que saliera. Esta obedeció acto continuo, porque precisamente tenía que dar órdenes para la comida. Señorita continuó el joven, está usted en su casa, y mi deseo es que se encuentre bien en ella y sea dichosa.
Se levantó Leonora apoyándose en el brazo de Rafael, y comenzaron a pasear por las ancha avenida que conducía a la plazoleta desde la verja de entrada. Al alejarse de la casa, por entre las tupidas copas de los naranjos, la artista sonrió maliciosamente, moviendo una mano en actitud de amenaza. Confío en que usted habrá vuelto de su viaje más serio y respetuoso.
Después entraba la marquesa vestida con llamativo lujo y apoyada en el brazo de él mismo, que iba de frac, con una perla enorme en la pechera. El encargado del establecimiento le saludaba familiar y respetuoso, como á un parroquiano conocidísimo; las mujeres admiraban de lejos las joyas de Elena; un groom diminuto como un gnomo se llevaba la rica capa de pieles de la señora, que esparcía un perfume de jardín de ensueño.
Sus compañeras las senior, instaladas en el mismo cuerpo de edificio que ella, hablaban de la nueva vida que iban á encontrar al salir del colegio; y las junior, que empezaban sus estudios, las oían en un silencio respetuoso de seres inferiores. Una de las amigas de Mina pensaba casarse apenas volviese á su casa; era asunto convenido por las familias de los dos novios.
Al bajar al patio, María observó que estaban quitando los caballos del de la duquesa. Un lacayo bajó con aire respetuoso el estribo de un coche simón. María entró en él henchido el corazón de impotente rabia. Al día siguiente declaró resueltamente al duque que no continuaría dando lecciones a su hija.
El cazador le aguardaba en Cebre, e hicieron la jornada juntos; Primitivo, por más señas, se mostró tan sumiso y respetuoso, que Julián, quien al revés que don Pedro poseía el don de errar en el conocimiento práctico de las gentes, guardando los aciertos para el terreno especulativo y abstracto, fue poco a poco desechando la desconfianza, y persuadiéndose de que ya no tenía el zorro intenciones de morder.
Sentada ya Poldy, se puso a meditar, y hubo de distraerse por tal arte, que, como vulgarmente se dice, se le fue el santo al cielo. Cual no sería su asombro y cual no sería su júbilo, cuando de repente sintió ruido y sin tener tiempo para recobrarse, vio llegar a un gentil caballero, que se aproximó respetuoso y vino a ponerse de hinojos a sus plantas. Imposible dudar.
Al anochecer de aquel mismo día volvió a entrar el general en el palacio del Rey Venturoso con la carta del Kan de Tartaria entre las manos. Haciendo un gentil y respetuoso saludo, se la entregó a la Princesa. Rompió ésta el sello y se puso a leer, pero inútilmente: no entendió una palabra. Al Rey Venturoso le sucedió lo mismo.
Con el gesto grave y respetuoso de un servidor nacido en la casa y ligado a la señora por el afecto, dábala el brazo al bajar y subir las escaleras, y la acompañaba a las iglesias, buscando los mejores sitios para que gozase con toda comodidad de las místicas ceremonias. Los parientes de la anciana huían de su casa, ofendidos por el maternal afecto con que distinguía al estudiante.
Adquiridos tan indispensables elementos, dióse principio, á las seis de la tarde, á la distinguida diversión, con no poca sorpresa y hasta admiración de la gente menuda, que invadió bien pronto la pradera, formando ancho y respetuoso círculo alrededor de los danzantes.
Palabra del Dia
Otros Mirando