Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 28 de junio de 2025


Lo primero que lamenta un hombre honrado en Mabille, al ver aquellas beldades, hez de la sociedad, verdaderos sepulcros blanqueados, entregarse á los más repugnantes alardes de impudor, entre las frenéticas dislocaciones del obsceno cancán, es que á tanto y tan asqueroso vicio se haya erigido un templo tan hermoso; y como consecuencia de tan oportuna lamentación, échase uno á considerar lo que aquello sería y el apacible deleite que ofreciera si, en lugar de las turbas de impúdicas artificiales bellezas que se subastan allí, haciendo, para lograrlo mejor, una repugnante gimnasia, lo poblaran mujeres honradas y de buena educación.

Guiñaba los ojos y acompañaba este gesto con un ademán obsceno para indicar que eran algo más que «alegres» las tales cosas. A continuó me interesan las bromas que se permitían los antiguos; no hay una que se me escape. Venga usted, tío, y se divertirá un rato. Usted, como todos los que creen conocer la catedral, habrá pasado muchas veces junto a esas cosas sin verlas.

Entre las concavidades de las rocas marinas, en lechos de algas o sobre las cernidas arenas de la playa, deposita el pez hembra sus huevas; deslízase luego sobre ellas el amoroso macho, y las fecunda. ¿Culpa nadie de obsceno al naturalista que lo consigna en sus libros?

Cuando acababan los cantos, prorrumpía el público en aclamaciones de entusiasmo obsceno, y otra vez era glorificada la Macarena, la hermosa, la única, la que daba... disgustos a todas las Vírgenes; y el vino circulaba en vasos a los pies de la imagen, y los más vehementes le arrojaban el sombrero como si fuese una moza guapa; y no se sabía ya qué era lo cierto, si el fervor de iluminados con que cantaban a la Virgen o la orgía ambulante y pagana que acompañaba su tránsito por las calles.

La letra 'O' hecha con el pulgar y el dedo índice significa 'OK' en los Estados Unidos, mientras que en Argentina es un gesto obsceno. Cuando asistamos al desarrollo inevitable de la videoconferencia multilingüe multimedia, será necesario corregir visualmente estos gestos.

Al notar la distracción del muchacho, el maestro pensó que estaría leyendo alguna novela, y por temor de encontrarse con un nuevo libro obsceno y vergonzoso, no se lo pidió, limitándose a observarle que no se venía a la clase a leer novelas... No estoy leyendo novelas, replicó Manuel Peralta, con su desagradable voz de pollo que comienza recién a cacarear.

Verás que el histrión mímico en ellas Gasta más artificios que Juanelo, En el subir del agua con gamellas. Hasta que aparador hace del cielo El scénico tablado, que ha servido De obsceno lupanar á vil martelo. Luego serás del vulgo conocido En el cartel que diga: DE FULANO, HOY LUNES A LAS DOS, bravo sonido.

Y al tiempo de separarme la di el ósculo de pazTambién recuerdo que en cierta ocasión, habiendo sorprendido en un discípulo un ademán obsceno, cayó sobre él exclamando: «¡Infame, todavía no estamos en Sodoma y en Gomorra!» Y por poco le despedaza. Finalmente, en estas y otras cualidades guardaba el buen profesor muchos puntos de semejanza con el elefante.

Voy a hablar de algunos de nuestros mosquitos más distinguidos. Conviene de vez en cuando sacudirse las moscas. Divídense en cuatro grandes familias a cual más perversa y endemoniada. La primera es la de los mosquitos sentimentales, que son los de apariencia más inofensiva, aunque en realidad haya motivo para guardarse bien de ellos. Tienen un zumbido dulce y quejumbroso, que al principio no molesta gran cosa, pero que llega a hacerse insoportable. De estos mosquitos, algunos empiezan a disgustarse de la vida así que entran a cursar la segunda enseñanza; salen generalmente suspensos en los exámenes, reciben innumerables coscorrones del jefe de la familia y se enamoran perdidamente y en secreto de una mujer de treinta años. Hasta aquí sus estragos no pasan del círculo de la familia; mas al llegar a los diez y seis años comienzan a hacer coplas amargas como la hiel, inspiradas por lo común en La desesperación de Espronceda, un estúpido y obsceno poema fabricado por algún estudiante de medicina para deshonrar el nombre del ilustre poeta. Estas coplas se escriben con lápiz mientras los papás se figuran que está allá en su cuarto enfrascado en el estudio, y sólo son admiradas de algún amigo discreto que recíprocamente presenta a su admiración otras coplas no menos amargas. Tal vez que otra estas coplas, que ruedan por los bolsillos de los pantalones hasta que se pudren, caen en manos de la mamá al tiempo de coser o acepillar la ropa: la mamá, claro es, no sabe lo que aquello significa, pero corre a mostrárselo al papá, ¡y aquí fue Troya!

Palabra del Dia

irrascible

Otros Mirando