Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 28 de junio de 2025


Y don Juan, animado por sus rancios entusiasmos, entornaba los ojos, como para ver mejor el hermoso cuadro del pasado.

De vez en cuando hacía una pausa, y la anciana labradora entornaba los ojos lentamente como para grabar los hechos en su memoria. Cuando Juan Claudio habló de los heridos, la buena mujer murmuró en voz baja: «¡Gaspar se ha escapado de ésta!». Por último, cuando acabose aquella lúgubre historia, hubo un largo silencio y ambos se miraron sin decir una palabra.

Algunas veces, después de haber avanzado la pilastra de fichas, entornaba los ojos como si escuchase á su colaborador invisible, movía la cabeza en señal de asentimiento y retiraba su puesta. Surgía de nuevo el murmullo de satisfacción al convencerse el público de que había retirado su dinero á tiempo, lo que equivalía á un triunfo negativo.

Otra vez, enardecido por su propias palabras y seguro de la aceptación de Elena, se atrevió á poner las manos sobre su cuerpo, pero se vió repelido. No dijo ella severamente, á la vez que entornaba los ojos con malicia . Le advierto que mientras no hayamos llegado á París sólo seré para usted una compañera de viaje.

Si alguno de los dos hace fuego después de la tercera palmada, será declarado felón y descalificado inmediatamentePirovani, con la pistola en alto, avanzaba la cabeza y entornaba los ojos para oir mejor, acogiendo con movimientos afirmativos cada palabra de Torrebianca. Canterac permanecía impasible, como un hombre que está escuchando algo que conoce sobradamente.

Mis ojos no se apartaban casi nunca de su rostro: ella entornaba a menudo los suyos para dirigirme una sonrisa apretando al mismo tiempo mi mano. Observé, no obstante, que se había amortiguado un poco la viva expresión de su fisonomía y que iba perdiendo aquella graciosa volubilidad del principio.

A veces levantaba su pecho el temblor de un sollozo, y lágrimas abundantes corrían por sus mejillas; besaba entonces los pies del Cristo, entornaba los párpados y parecía rezar... La marquesa habíase sentado a los pies de la cama, en el gran butacón, y rezaba el rosario. Sonaron los cascabeles de un coche, y la dama hizo un movimiento para levantarse. Diógenes abrió los ojos muy azorado.

Después, con las frecuentes conversaciones, se había establecido entre ellos cierta intimidad. ¡El dinero! ¡Lo que costaba de ganar y lo necesario que era para la vida!... Y la «bella sombrerera», como la llamaba Isidro socarronamente, entornaba los ojos hablando de los sacrificios que impone el negocio; de lo triste que era abandonar su pisito de la Avenida de Ternes, donde todo estaba en orden y a punto para las necesidades de la vida, con el cuidado de una mujer que sabe dar valor a los pequeños objetos y colocarlos en su sitio.

El, con los ojos puestos en ella, espiaba su rostro, esperando la caída de una mirada, de un monosílabo de aceptación. Alicia temía encontrarse con estos ojos implorantes, y entornaba los suyos. Di que murmuró Lubimoff , di que quieres. Por algo nos hemos encontrado; por algo viniste á buscarme. Vamos á rehacer unas vidas que se torcieron por nuestra vanidad y nuestro orgullo.

Mis ojos no se apartaban casi nunca de su rostro: ella entornaba á menudo los suyos para dirigirme una sonrisa apretando al mismo tiempo mi mano. Parecía que en virtud de un misterioso movimiento de su espíritu, la niña se transformaba en mujer en pocos instantes. Dejó de apretar mi mano y hasta retiró la suya: volví á cogerla disimuladamente, pero al poco tiempo la retiró de nuevo.

Palabra del Dia

dermatológicas

Otros Mirando