Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 28 de julio de 2025
Don Román, severo e irascible, dictó nuevas órdenes, amenazó con duros castigos, y luego, haciendo un gesto de dolor, pronto borrado por una expresión resignada de tristeza, vino al estrado. Siéntate, siéntate aquí, en este sillón. ¡Qué gusto me da verte! Cuando te fuiste creí que no me volverías a ver.... Estoy ya muy viejo. ¿No me ves? En Febrero cumpliré los setenta y dos.
Dentro de pocos días estarás sano... Yo te quiero mucho más que antes porque al verte caer comprendí de una vez hasta dónde habías entrado en mi corazón... Y mi hermano añadió bajando los ojos y ruborizándose quiere adelantar la fecha de nuestro matrimonio. Los ojos de Tristán brillaron con alegría. ¿Cómo...? ¿Es de veras? Eso me ha dicho ayer respondió Clara dulcemente.
Pero no pudo seguir, y se echó á llorar. Váyase usted.... Usted es muy bueno y me dejará sola. Si vienen ahora, ¿qué van á decir? No vendrán: tranquilízate dijo Bozmediano algo contrariado por aquel recibimiento. Somos ya verdaderamente amigos. Hoy vengo á hablarte, á verte. Ya sabes que me he declarado tu protector.
¡Ay! suspiró la abuela, cuánto preferiría verte reclamar un buen marido... Sabes que la mujer del coronel Dauvat me ha hablado para ti de un joven teniente que... Me escapo; abuela, me escapo... Nada de tenientes, por amor de Dios... Por ahora, vivan las solteronas... Chiquilla murmuró la abuela, encogiéndose de hombros. Mala chiquilla...
¡No!, dijo tristemente Roussel; porque llevarías contigo el recuerdo de Herminia y serías aún más desgraciado estando lejos de ella ... Y yo tendría la doble tristeza de verte sufrir y de pensar que sufrías por ser yo un egoísta ... Lo que me impedía dejarte en libertad de amar á esa muchacha, que es sin duda adorable y buena....
Cada vez que me asomo a los hombres, me echo atrás como si viera un abismo; pero de cada vez que vengo a verte, saco un brío para batallar y un poder de perdón que hacen que nada me parezca difícil para que yo lo acometa.
Cada vez que pienso en que mañana me he de separar de ti, Magdalena adorada, cada vez que pienso en que al volver a verte habrá un tercero ahí cuya presencia me prive de caer a tus pies, de estrecharte contra mi pecho, te juro que estoy tentado a abandonarlo todo por ti. Y al decir esto Leoville ceñía con su brazo el talle de Magdalena, que se dobló acercándose más a su novio.
Para que los dos seamos uno solo, me falta muy poco; sólo me falta verte y recrearme en tu belleza, con ese placer de la vista que no puedo comprender aún, pero que concibo de una manera vaga. Tengo la curiosidad del espíritu, pero la de los ojos me falta. Supóngola como una nueva manera del amor que te tengo. Yo estoy lleno de tu belleza; pero hay algo en ella que no me pertenece todavía.
Me he acostumbrado a verte, necesito cuidarte, eres mi única familia; antes no tenía ninguna aspiración, vivía sin esperanza; ahora tengo una: verte sano y fuerte. ¿Y me dices con esa frescura que te vas...? No, no te irás.... Eso me faltaba: tras la hija, el hermano... ¡Que me maten de una vez! ¡Señor Dios, llévame contigo...!
Un barómetro enorme, dorado y con vistosos adornos, regalo de Sánchez Morueta, era el único objeto notable y el que más estimaba el capitán, pues, por sus hábitos de hombre de mar, siempre se estaba preocupando del tiempo. Tenía muchas ganas de verte dijo Iriondo, ocupando de nuevo su sitio ante la mesa. ¡Las veces que he pensado en ir á pasar un día en las minas! Allí hay caza ahora, ¿verdad?
Palabra del Dia
Otros Mirando