United States or Eritrea ? Vote for the TOP Country of the Week !


Tengo algunos respondió el prócer echando agua al mismo tiempo en el vaso de Venturita. Esta se estremeció de gratitud. La sangre se le agolpó al rostro. La suya es una de las primeras galerías de Europa decía, en tanto, por lo bajo Cosío a Peña. Me gusta la pintura porque es el arte nacional siguió diciendo el magnate.

Miraba á su primo con satisfacción. ¡Cómo le querían! ¿eh? ¡Cómo sentían la necesidad de no dejarlo solo, resarciéndole de la antigua frialdad! ¡Oh, la familia!... Hasta á Urquiola alcanzaba su gratitud. No podía permanecer indiferente con aquel muchachón que le llamaba tío á boca llena, extendiendo á él su lejano parentesco con la señora. Además le protegía en sus deseos de enfermo.

PATROS. Voy volando. Hoy, Virgen mía, mi ofrenda será mayor: debiera ser tan grande que dejara sin una flor el jardín de mis tíos; quisiera poner hoy ante tu imagen todas las cosas bonitas que hay en la Naturaleza, las rosas, las estrellas, los corazones que saben amar... ¡Oh, Virgen santa, consuelo y esperanza nuestra, no me abandones, llévame al bien que te he pedido, al que me prometiste anoche, hablándome con la expresión de tus divinos ojos, cuando yo con mis lágrimas te decía mi ansiedad, mi gratitud...!

Las que eran pobres quisieron ganar su vida y no deberla á la gratitud amorosa de un hombre, considerando el trabajo como un medio de libertad é independencia. No vieron ya un misterio en los estudios científicos, que habían sido patrimonio hasta entonces de los hombres, y se asociaron lentamente para una acción común todavía no bien determinada.

Yo no lo que hará el señor de Miranda; pero lo que es el pobre papá... besaría en donde usted pisa. Estoy segura de ello. Y Lucía, con un movimiento de apasionada y popular gratitud, hizo ademán de inclinarse ante Artegui. Un marido no es un padre... contestó éste . Lo racional, lo sensato, señora, es que me vaya.

Se me anuncia que el vapor Victoria debe salir para Honda, en el alto Magdalena, dentro de una hora, y sólo entonces comprendo las graves consecuencias que va a tener para mi el retardo del Saint-Simon, al que ya debo los atroces días de la Guayra. Todo el mundo nos recibe bien en Salgar y el himno de gratitud a la tierra colombiana empieza en mi alma. El río Magdalena. De Salgar a Barranquilla.

Era como perla que se esconde en un muladar. Ella me amó con el fervor y la ternura que hubiera yo querido hallar para en el corazón de alguna gran señora o de alguna princesa. Y yo gocé mal de aquel amor sin llegar a comprenderle, y le desprecié y me harté de él después de haberle gozado. La plebeya ruindad de mi enamorada trocó mi afecto y mi gratitud en vergüenza.

No los necesitaba, sin duda, porque la cosa era tan clara...; pero quiso llevarlos por previsión o delicadeza. Al salir echó sobre su pobre aposento una mirada de lástima en que también había algo de gratitud. Le parecía tan excesivamente humilde, que se admiraba de que ella se hubiera dignado por tanto tiempo honrarlo con su presencia.

Supón que fueras un hombre notable entre los de tu calaña, el más ciego de los ciegos, el más loco de los locos: ¿qué harías, cuál sería tu aspiración? Yo no tengo aspiraciones bastardas; no quiero medrar á la sombra de un tirano que pague la adulación con dinero; yo no aspiro más que á la gratitud del género humano, á la gloria. ¿Gloria por ese camino?

Este, al salir, dirigió a Teobaldo una mirada de gratitud. »Yo no me atrevía a salir de la habitación; no obstante, fue necesario hacerlo cuando llegó la hora de comer. Mi tío estaba solo en el comedor, sombrío y silencioso. A algunos pasos de él y a su espalda encontrábase Carlos, pálido y sin poder apenas sostenerse; al verme, su fisonomía expresó una gran satisfacción.