Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 23 de junio de 2025
¡Qué estupor inmenso! ¡Qué agitación creciente en el fondo del ser moral, mientras el cuerpo se estremece, tiembla y aspira, mudo y angustioso, a separarse de la fascinación del abismo!
Tus ultimas ordenes quedan fielmente ejecutadas. ?Quien es este audaz? iun mortal! itemeraria criatura, pon la rodilla en tierra y adora! Este hombre no me es desconocido, es un poderoso magico cuya ciencia es temible. Arrodillate y adora a Ariman, vil esclavo, ?no reconoces a nuestro senor y al tuyo? Tiembla y obedece. Arrodillate, hijo del polvo vil, y teme nuestra venganza.
Si tiembla la roca á los embates del mar, sabe perfectamente que nada tiene que temer, que la que causa aquel ruido es su bondadosa nodriza. Encuéntrase mecido, le vence el sueño y dícela: Buenas noches. Conchas, nácar, perla. El esquino ha asentado el límite del genio defensivo.
Aún más, ¿por qué te faltan el orgullo y la fuerza? ¿Por qué no puedes decirle: «Refúgiate a mi lado; si tu corazón tiembla, en mí encontrarás nuevas fuerzas, velaré sobre ti y sostendré tus pasos.» He ahí lo que habrías hecho tú, hermana; no, no me contradigas.
El horrendo crimen, cometido por orden del Rey, no produce el resultado apetecido, porque la Infanta se niega á dar su mano al asesino, manchada con la sangre de su esposa. El conde de Barcelona se acerca con una armada para vengar la muerte de su hija; un hijo de la muerta es el Almirante, y el Rey tiembla ya en su capital.
Don Víctor calla anonadado por la emoción; luego, haciendo un último esfuerzo, añade: Después me lo quitaron... me quitaron mi bastón, ¿eh?... mi bastón con el puño de vuelta... Y desde entonces... desde entonces... Su voz tiembla y se apaga en un silencio de tristeza infinita.
Vamos a partir el sol; pero como no hay sol, se partirán las estrellas... Hagamos una raya en la arena. Por mi parte, pronto estoy dijo D. Pedro, viendo avanzar hacia el ruedo la espantable figura del caballero armado . Me parece que tiembla usted, lord Gray. Y en efecto, el supuesto lord temblaba.
Pregúnteselo usted a tía Tomasa. Hasta dicen que si son tan amigos es porque ella le fabrica cierta untura que le sienta como de mano de ángel. Lleva un perro rabioso agarrado a salva sea la parte, y por eso tiene ese genio insufrible. La mañana que se levanta de mal teque, tiembla el palacio y después toda la diócesis. Es un hombre bueno, pero cuando le muerde detrás la mala bestia, hay que huir.
Se me habrán perdido...; que yo tenía los veintiuno esta mañana.... No puede ser: yo te di dos reales en plata. Es que ... los cambié en la plaza.... ¿Qué ha hecho tu madre esta mañana? pregunta rápido el Tuerto al mayor de sus hijos, cogiéndole por un brazo. El chiquitín tiembla de miedo, mira alternativamente á su padre y á su madre, y calla. ¡Habla pronto! dice el primero.
No obstante, yo admiro a usted dijo Blasillo anonadado. ¡Bebamos, niño! ¿ves? la espuma plateada tiembla y chisporrotea. Bebamos, y arrojemos a la sombra los negros recuerdos del pasado. ¡Por tu amante Juana, por sus ojos negros! Blasillo repitió casi maquinalmente: ¡Por Juana y sus ojos negros! Blasillo, ¿dónde iremos a arrojar el áncora?
Palabra del Dia
Otros Mirando