United States or Åland ? Vote for the TOP Country of the Week !


Así vagó Ulises sobre los océanos, como el rey de Itaca sobre el Mediterráneo, guiado por una fatalidad que lo alejaba de su patria con rudo empellón cada vez que se proponía regresar á ella. La vista de un buque anclado junto al suyo y próximo á partir con lejano destino era para él una tentación que le hacía olvidar la vuelta á España.

»Traté de insistir, queriendo convencerla de las ventajas que le aportaba ese enlace. Yo le proponía un joven rico, y considerado; mi vida no podía ser muy larga; ¿qué sería de ella, cuando le faltasen mi apoyo y mi cariño?

Ahora, por primera vez en su vida, le habían puesto cinco hermosas guineas en la mano; nadie se proponía compartirlas con él, y él no quería lo bastante a ningún hombre para ofrecerle una parte. Pero, ¿qué valor tenían las guineas ante los ojos de Marner, que no veía más perspectiva que la de innumerables días de trabajo en su telar?

Lo más gracioso era que él se las echaba de hombre ocupado. ¡Valiente truhán! ¡Si no tenía absolutamente nada que hacer más que pasear y divertirse...! Su padre había trabajado toda la vida como un negro para asegurar la holgazanería dichosa del príncipe de la casa... En fin, fuese lo que fuese, Jacinta se proponía no abandonar jamás su actitud de humildad y discreción.

Suponiendo que el Rey volviese al trono, le devolveríamos la Princesa. Pero ¿y si no lográsemos libertarlo? Punto era éste del cual jamás habíamos hablado. Pero yo tenía la idea de que, en tal caso, Sarto se proponía instalarme en el trono de Ruritania y sostenerme en él toda la vida. Al mismo Satanás hubiera él puesto en el trono antes que a Miguel el Negro. El baile fue suntuoso.

Era una cita á solas en el misterio de la noche, con un amplio espacio de tiempo por delante. Lo único molesto era la necesidad de marchar, de unir á los abrazos y los juramentos de amor una incesante actividad ambulatoria. Ella protestaba, saliendo de su arrobamiento, cada vez que el enamorado le proponía sentarse al borde del camino.

Tenía enfermo el corazón, el órgano rebelde á todo reparo. Por más que intentó animar al enfermo con palabras alegres, el viejo, con su astucia aguzada por el miedo, adivinó la ineficacia del remedio, entre aquellos planes de curación que Aresti le proponía por decir algo. ¡Lo mismo que los otros! gimió. ¡Ay Virgen de Begoña!... ¡Virgen de Begoñaaa!

¡Te obligaron a ello! dijo prontamente; y luego, alzando la frente y fijos sus ojos en los míos, añadió: Quizás hubiera sucedido lo mismo aun revelándome la verdad. ¡Porque mi amor eras siempre , no el Rey! Y levantándose, me dio un beso. Me proponía confesártelo todo dije. Iba a hacerlo la noche del baile, en Estrelsau, pero Sarto me interrumpió.

Figuraba en todas las almonedas como comprador de fuerza, y si algún corredor le proponía la adquisición de alhajas antiguas o muebles raros siempre, se entiende, con considerable ventaja , aceptaba sin vacilación, pues no era dinero lo que faltaba en el enorme secrétaire del siglo pasado, que ocupaba todo un paño de su alcoba, mostrando el menudo mosaico de sus tres filas de cajoncitos.

Llegó la noche hermosa y clara, aunque yo la hubiera preferido tan obscura y tormentosa como la que protegió mi primera expedición, pero la fortuna no quiso mostrárseme favorable. No obstante, contaba deslizarme lo más cerca posible al muro, para no ser visto desde las ventanas del castillo nuevo que daban a la parte del foso por donde me proponía escalar el puente.