Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 25 de junio de 2025


Yo le compraré a él muchas velas afirmó Jacinta . ¿Verdad, hijo, que quieres velas? Lo que él quería principalmente era que le llenaran la barriga, porque volvió a dar aquellos bostezos que partían el alma. «A comer, a comer» dijo Benigna, convocando a toda la tropa menuda. Y los llevó por delante como un hato de pavos.

Compraré un hermoso castillo en Turena y haré quitar de él todos los espejos. De todas formas, tendrás los ojos de tu amante para mirarte en ellos. LA CHOUTE. ¡Quita de ahí...! De hoy en adelante no tendré ya enamorado. Temeré deducir de su actitud los progresos de mi decadencia.

Voy a preguntarle una cosa, respetable Sr. de Ponte: ¿en qué empleará usted los primeros cuartos de la pensión? En una obra de justicia y de caridad. Le compraré unas botas a Benina cuando parezca, si parece, y un traje nuevo. Pues yo le compraré un vestido de odalisca. Es lo que le cuadra, desde que se ha dedicado a la vida mora. ¿Qué dice usted? ¿Se sabe dónde está ese ángel?

Yo se lo compraré, yo, yo. ¿Verdad, hijo?... Ven acá, ven acá, que la tía se marcha. Oye ..., dame una peseta. ¿Para qué? Vaya que estás lela... Para el pandero». Diole Isidora la peseta, y la Sanguijuelera se fue gruñendo.

¡Mira, si no te callas, te doy azotes!... Vamos, duérmete: si te duermes, te compraré un caballo para que vayas al Retiro montado como tu amiguito Julián... y después te llevo al Circo a ver los clowns... ¿no te acuerdas de los saltos que dan? ¡Qué saltos tan grandes sobre el caballo! ¿eh?... Y la niña rubia que se sube al trapecio, ¡qué bonita!, ¿eh?... Y después vamos a casa de Julianito, y comerás dulces... y otro día iremos a Leganés a ver a la tía Adelaida para que te regale el pajarito de cristal que canta dándole cuerda... y lo traeremos para casa, ¿verdad?... ¿No te gusta?

Allí estaban los ocho mil reales. Podía hacer don Ramón lo que quisiera. Ellas confiaban en él como si fuese su padre. Bueno; compraré Cubas. El pollo pasará por aquí cuando guste, para que le entere de la marcha del capitalito. Y don Ramón les acompañó hasta la mampara, cobijando con mirada amorosa de padre a sus tres clientes.

Eso es aparte. Y cerillas. Las compraré al por mayor. Una gruesa... Traeremos al por mayor todo lo que se pueda, para lo cual destinará usted una cantidad que se carga a la cuenta del mes. Quédese el diario en diez reales, y deme usted seis duros para el por mayor. Adelante. ¿Qué principio traigo? Langosta. ¡Un ojo de la cara! No importa. Por una vez... ¿Qué postre?

32 Pero en cuanto a las ciudades de los levitas, y de las casas de las ciudades, que poseyeren, los levitas tendrán redención siempre. 33 Y el que comprare de los levitas, la venta de la casa, y de la ciudad de su posesión saldrá en el jubileo; por cuanto las casas de las ciudades de los levitas es la posesión de ellos entre los hijos de Israel.

Para evitarte molestias no quise casarme otra vez... ¡Qué no haré yo por ti, Ida mía!» «El año próximo pienso dar por terminados mis negocios en América, y volveré á nuestra patria, y compraré un castillo del que serás la reina; y tal vez se enamore de ti algún noble oficial de caballería con apellido ilustre, y tu pobrecito papá tendrá celos... ¡muchos celos!...»

Compraré una; miraré bien esta para tomarle bien las medidas». Estaba Maximiliano con la hucha en la mano mirándola por arriba y por abajo, como si la fuera a retratar, cuando se abrió la puerta y entró una chiquilla como de doce años, delgada y espigadita, los brazos arremangados, muy atusada de flequillo y sortijillas, con un delantal que le llegaba a los pies.

Palabra del Dia

cabalgaría

Otros Mirando