United States or Greenland ? Vote for the TOP Country of the Week !


Tuvo una inspiración después, y quiso dejar tan trillado camino. Ideó un Subieski, un Solimán, un Arnoldo de Brescia, y, por último, un Padilla; pero no bien había escrito algunos versos, retrocedió por miedo á la antigüedad, y se fijó en los Gracos. Dió principio á la obra, y la remató poco antes de las escenas que estamos refiriendo.

Degemos á los sabios la rectificacion de los yerros que necesariamente deben resultar en materia tan complicada. Reyes de Zaragoza. Almondar ben Yahye. 430 Solimán Algiuzami. 438 Ahmed ben Soliman. 474 Jucéf ben Ahmed. 478 Ahmed Abu Giafar. 503 Abdelmalek Abu Meruan. 512 Ahmed Abu Giafar ben Abdelmalek. 540 de quienes habla Zurita en sus anales.

Antes de hacerlo, conviene, sin embargo, recordar que, hallándose los caballeros de la Orden de San Juan de Jerusalén dispersos y sin domicilio propio después de la toma de la isla de Rodas por Solimán, como el gran Maestre y principales dignatarios se acogieran á la ciudad de Zaragoza de Sicilia, dióles el Emperador Carlos V para habitación y defensa la isla de Malta y la ciudad de Trípoli, con las conquistas del Conde Pedro Navarro y D. Hugo de Moncada.

La tragedia de Honra de Dido restaurada, expone las pretensiones amorosas de Yarbas, rey de Mauritania, para obtener la mano de la reina de Cartago, y la muerte de ésta. En la Tragedia de la ruyna de Constantinopla, cabeza del imperio Griego, por Mahometo Solimán, Gran Turco, figuran muchos personajes alegóricos, como la imagen de la república, la discordia, la envidia y la ambición.

Muchos de los prisioneros de los Gelves murieron en el cautiverio ó lo soportaron largos años: algunos de los significados debieron la libertad á la favorable ocasión de las treguas ajustadas por el Emperador Fernando con Solimán el año 1562, pues gracias á la gestión del Rey Felipe II se asentó entre las cláusulas del tratado el canje ó entrega de los principales, sin que alcanzara, sin embargo, el beneficio á Sande por el juramento que decían el gran Señor tenía hecho al Profeta, y cosa es digna de referir cómo unos pocos consiguieron librarse por mismos.

Solimán, poderoso monarca de los osmanlíes, había dirigido todas sus fuerzas contra aquella isla, la cual, después de largo asedio y de una defensa pasmosamente heroica en que perecieron más de cien mil turcos, tuvo necesidad de rendirse.

Aseguraban al Monarca que era la empresa cierta ejecutándola con celeridad y secreto, porque entretenido Dragut en cabalgadas y presas hacia el interior de Berbería, no contando Trípoli con más de 500 turcos de guarnición, sin repuesto de mantenimientos; asegurado el concurso del Rey de Caraván y el de la mayoría de los berberiscos, vejados y oprimidos de los turcos, por naturaleza soberbios, injustos y avaros; y siendo difícil que á tiempo tuviera socorro Solimán de tan larga distancia, concurrirían las circunstancias contra el astuto corsario y debían de aprovecharse antes que su creciente poderío llegara á amagar otros puntos.

Deshacían los cadejos de sus greñas abandonadas, animábanse el rostro con blanco solimán y roja cochinilla, «saliendo de bajo de cubierta según un viajero de entonces tan bien tocadas, rizadas, engrifadas y repulgadas, que parecían nietas de las que eran en alta mar». La gloria, la riqueza y hasta el gobierno de pueblos estaban al alcance de todos al otro lado de los mares.

La historia de la cadina era cierta, mas la babucha habíala comprado él en el Gran Bazar, por mero capricho, a uno de esos viejos turcos de rostro impasible, ojos de vidrio, enorme turbante y caftán naranjado, que recuerdan todavía en la Constantinopla moderna los tiempos de Bayaceto y Solimán el magnífico.

F. 1009| | Set. P. 1039 hijo de Jahia. | | | á . .29 m. 8. d. | | | X. Soliman Abu-Aiub Ben-Hud Algiozami | Set.