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Actualizado: 21 de junio de 2025
Las cuentas estaban muy embrolladas, padre, y sin quererlo se ha podido traer lo que no le pertenecía. ¿Verdad, Fabriciano, que sólo venimos a deshacer ese enredo? ¡Y que lo digas! Ten confianza en que el padre no nos dejará marchar sin llenarnos bien los bolsillos. Si vosotros no lo sabéis, vuestra madre sabe que todo lo que había en la casa me pertenecía.
Cada uno viste como quiere, y si yo prefiero este traje a los franceses que venimos usando hace tiempo, y ciño esta espada que fue la que llevó Francisco Pizarro al Perú, es porque quiero ser español por los cuatro costados y ataviar mi persona según la usanza española en todo el mundo, antes de que vinieran los franchutes con sus corbatas, chupetines, pelucas, polvos, casacas de cola de abadejo y demás porquerías que quitan al hombre su natural fiereza.
24 Y siendo despertado José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer. 25 Y no la conoció hasta que dio a luz a su hijo Primogénito; y llamó su nombre JESUS. 2 diciendo: ¿Dónde está el Rey de los Judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle. 3 Y oyendo esto el rey Herodes, se turbó, y toda Jerusalén con él.
Nada habría perdido el mundo con que os hubierais quedado por allá..., en el Limbo. Venís de Tomás Rufete, y ya sé que de mala cepa no puede venir buen sarmiento. A eso voy, tía, a eso voy. Precisamente... Usted lo debe saber, como yo... Precisamente, ni yo ni mi hermano venimos de Tomás Rufete. Justo, justo; mi Francisca, mi ángel os parió por obra del Espíritu Santo, o del demonio.
Os venimos a molestar muy tarde, querida dijo la señora Cass, tomando la mano de Eppie, mirándole el rostro con expresión admirativa y de vivo interés. La misma Nancy estaba pálida y trémula. Eppie, después de haber acercado sillas para el señor Cass y su señora, fue a ponerse de pie junto a Silas y frente a ellos.
Quien haga reflexîon sobre la flaqueza del entendimiento humano, lo poco que se sabe, y lo mucho que se ignora, la facilidad con que caemos en el error: los extravíos á que venimos por los sentidos, por la imaginacion, por el ingenio, por los falsos raciocinios, por la precipitacion del juicio, por falta de método, cosas todas que cada uno de nosotros tiene cada dia ocasion de experimentar en sí mismo, será preciso que confiese, que las luces naturales del hombre no le subministran noticias bastante seguras, fieles y constantes para llevarle al supremo Príncipe de todo lo criado; para lo qual las noticias que él se ha dignado dar de sí mismo por medio de la revelacion, hacen la total certeza con que se ha de caminar á buscarle.
Lo primero que debes hacer es dejarte el corazón en el barco y bajar a tierra sin él. Aquí no venimos a enamorarnos: venimos a hacer plata. Eso es... Luego, cuando recojas dinero no lo guardes contigo, pues te lo sacarán. No, no muevas la cabeza: te lo sacarán. Tú no sabes qué gentes hay en Buenos Aires; lo mejorcito de cada país. Yo soy yo, y sin embargo me han engañado muchas veces.
No te entiendo, no quiero. ¡Venimos a hacerte un favor, y nos sales con un sermón! ¡Queremos verte rico como nosotros, y nos contestas hablando de los demás, de la gente que no conoces, de esa humanidad que no te dio ni un mendrugo cuando vagabas como un perro...! Tendré que dirigirte como en nuestra juventud, cuando hacíamos la guerra.
No me creo el único. Los periodistas errantes y los cómicos somos la última y miserable prolongación de la España conquistadora. Vamos y venimos desde el estrecho de Magallanes á la frontera de California, pasando á través de diez y ocho naciones que hablan nuestra lengua, conociendo en unas partes la riqueza y en otras el hambre; aquí, el aplauso y la admiración; más allá, el insulto y la fuga.
Caballero, no venimos aquí a disputar, venimos a ejercer la caridad.... Condicional... ¡Qué condicional, ni qué calabazas! gritó doña Petronila, que no comprendía por qué se había de tener tantos miramientos con un ateo loco . Usted no tiene añadió autoridad alguna en esta casa; esta señorita es hija de don Santos y con ella y con él es con quien queremos entendernos.
Palabra del Dia
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