Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 14 de junio de 2025
Entonces la niña, con una fuerza que sorprendió a Miguel, le rechazó haciéndole tambalear. Adolfo volvió a la carga riendo groseramente. ¡Adolfo, que llamo a mi tía! gritó Maximina, roja como una cereza y saltándosele las lágrimas, y otra vez le rechazó con brío. Eso no se hace, chico dijo Miguel queriendo intervenir.
El cochero daba a conocer su aburrimiento e impaciencia. En una de las vueltas del vehículo, Rubín sorprendió en aquel hombre una mirada dirigida a una de las casas. «Aquí es... aquí está». Fijose cerca de allí, reduciendo el espacio de su paseo vigilante. Eran las siete. Por fin, en un momento en que Maxi iba de Sur a Norte vio, a bastante distancia, a un hombre que salía de la casa.
Don Marcos le sorprendió repetidas veces junto á una mesa del Casino, de pie y meditando antes de arriesgar alguna de las fichas que formaban breve columna oprimidas por su diestra. Parecía deslumbrado por la facilidad de sus ganancias. Eran pequeñas cantidades, pero ¡tan considerables en comparación con las que había recibido por sus trabajos anteriores!
Marta sorprendió aquel gesto, y llamándole a solas al pasillo se abrazó a él sollozando: ¡Don Máximo de mi vida, por Dios, cure usted a mi madre!... ¡Sí; mi madre se muere..., sí..., se muere!... Yo le he visto a usted hacer un gesto...
Adelante, adelante dijo la duquesa, dando a entender que conocía a la persona en su modo de llamar, y con una viveza nueva a los ojos de María, se puso en pie y salió obsequiosamente al encuentro de aquella visita. Pero María se sorprendió todavía más al ver este nuevo personaje. Era una mujer fea, de unos cincuenta años de edad y de aspecto común. Su traje era tan basto como desairado y extraño.
Su voz se hacía angustiosa; María Teresa, entristecida de verlo forzado a darle estas penosas felicitaciones, en un impulso de piedad le tomó la mano que apoyaba en el respaldo de un sillón, y reteniéndola entre las suyas, pronunció con una entonación de ternura que la sorprendió a ella misma: Gracias, Juan.
Y en ese momento levantó la cabeza y sorprendió la atenta y curiosa mirada de Delaberge. Lejos de sentirse ofendida por ello, sonrió al encontrar su mirada los ojos de éste y prosiguió: Vaya, decididamente es mucho mejor dirigirse a Dios que a sus santos... Que lo diga si no el señor inspector general.
Y al médico se le fue en seguida la sospecha". "22 de julio. "Camucha me señaló en el diario la noticia de que José Luis ha llegado de Europa hoy. Gran indiferencia mía que a Camucha sorprendió muchísimo. Dice que hago "pose". "Seguramente José Luis nos visitará". "24 de julio. "Adiviné: hoy nos visitó José Luis y anuncia para pasado mañana otra visita. "Lo recibieron Camucha y Zoraida.
Rumiando con amargura todo lo dicho, anduvo don Paco sin reparar el camino que llevaba, hasta que le sorprendió la noche, oscura como boca de lobo. Ni luna ni estrellas se veían en el cielo, cubierto de densas nubes. Llovía recio y relampagueaba y tronaba.
Volvió hacia su interlocutora, cuya delgada silueta se recortaba sobre el rojizo cielo de poniente, y murmuró: ¿Qué quiere usted decir? No se haga usted el ignorante, ya me entiende usted... Cuando vino Simón al mundo, fue para todos una gran sorpresa y más que nadie se sorprendió el Príncipe... Usted, usted solamente estaba en el verdadero secreto...
Palabra del Dia
Otros Mirando