Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 18 de septiembre de 2025


Sentíase tan contento el cura al decir: «Voy a subir al púlpito» que tuvimos que resignarnos a tener sermón todos los domingos. No bien abría la boca, tomaban las feligreses una postura cómoda para echar un sueñecito.

La de Ribert le echó una mirada escandalizada al verla sentarse con las piernas cruzadas, postura con que la incorregible Francisca se complace en excitar la indignación de las respetables aiglemontesas. La buena señora se calló sin embargo. He encontrado mi alma hermana, Francisca... He... Una imperiosa mirada de la de Ribert me cortó la frase.

"Dile quién es, Laura, para que él nos aconseje. "Le dije quién era, un viejecito algo opa, que fue peón en la estancia nuestra. "Y Camucha, sin cambiar de postura, le explicó muy seria: "Figúrese, Julio; cuando Zoraida era criatura la llevó en los brazos, y ahora quiere llevarme a al registro civil. "En realidad, yo creo que si en vez de Lorenzo la pidiera Julio... ¡Quién sabe!

Ambos permanecieron silenciosos: ella inmóvil, sin valor para rechazarle; él en la misma postura, sintiendo en la frente el dulce calor del pecho de su amada. Al cabo de unos cuantos minutos dijo Cristeta: Vamos, no te apures... mírame cara a cara. ¿Sirve esta pobre mujer para convencerte de que no lo has perdido todo?

Mientras los parroquianos no se escapasen sin pagar, el Gallego estaba dispuesto á reconocerles una historia maravillosa, viendo en todos ellos á un hijo ó sobrino de emperador descontento de su origen y ganoso de cambiar de postura. Otros tertulianos, los de aspecto más acomodado, se ocupaban del porvenir de este pueblo naciente. La suerte de él iba unida á la de González.

Hija mía respondió Bermúdez sin volver hacia ella más que la intención, porque la visual del ojo útil se la estorbaba la nariz , necesito ambos brazos para agarrarme, y toda la voluntad para guardar el equilibrio en esta postura. Contéstalos por , si te parece. Ya lo hago por todos repuso Nieves volviendo el busto hacia el muelle y agitando el pañuelo con la mano izquierda.

Luego volvió á la lectura, pero en su dormitorio, acabando por acostarse con el libro en la mano. Sonrió con una sonrisa que parecía una mueca al pensar que su fatiga nerviosa le había hecho tenderse en la misma postura de los muertos. Fué pasando las páginas, sin perdonar una sola línea, y sin embargo no podía decir qué es lo que estaba leyendo.

Fue uno de esos sueños que se parecen al morir instantáneo. La cabeza dio contra el canto como una piedra que cae, y la torcida postura en que quedaba el cuerpo al caer doblándose con violencia, fue causa de que el resuello se le dificultara, produciéndose en los conductos de la respiración silbidos agudísimos, a los que siguió un estertor como de líquidos que hierven.

Le complacía poco salir en procesión, bajo un paraguas, con la sotana remangada, perdiendo a cada paso los zapatos en el barro. Además, cualquier día, después de sacar en rogativa a San Bernardo, el río se llevaba media ciudad, ¿y en qué postura, como decía él quedaba la religión por culpa de aquella turba de vociferadores?

Ello fue que Belén, temblando de emoción y con la cara ansiosa, dijo a la monja: «Mauricia ha visto a la Virgen...». Y poco después repetían las otras con indefinible asombro: «¡Ha visto a la Virgen!». Sor Facunda, seguida de su escolta, se acercó a Mauricia, a quien miró un buen rato sin decirle palabra. Estaba la infeliz mujer en la misma postura morisca, la cabeza apoyada sobre las rodillas.

Palabra del Dia

suplicaban

Otros Mirando