Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 18 de mayo de 2025


No me digan a que ha resistido objetó doña Flora ; lord Gray es muy galán y muy lindo mozo... ¿A qué vienen con hipocresías?... La niña se marchó con él porque le dio la gana. Doña María estará satisfecha de la formalidad de las niñas... dijo Amaranta riendo . Ahora repetirá su muletilla: «Yo educo a mis hijas como me educaron a ». ¿Pero se ha marchado lord Gray con ella? pregunté.

Aquel «conque» era la muletilla de las señoritas Castro Pérez, y en Villaverde cuando de ellas se hablaba, todos decían «las niñas Castro Conque». ¿De qué se ríe usted? preguntó contrariada la rubia. De nada. Son ustedes muy maliciosas.... ¡Conque de casa! volvió a decir. No sabíamos que vivía usted allí, en el ¡«pa... la... cio» de la marquesita! ¿Por qué no avisa usted cuando muda de casa?

Si es pobre, el domingo y los días de grandes fiestas salen del fondo del arca las bien conservadas galas: mantón o pañolón de Manila, rica saya y mantilla para ella; y para el marido una camisa bordada con pájaros y flores, blanca como la nieve, un chaleco de terciopelo, una faja de seda encarnada o amarilla, un marsellé remendado, unos zahones con botoncillos de plata dobles y de muletilla, y unos botines prolijamente bordados de seda en el bien curtido becerro.

Conque, en resumen, don Jeromo concluyó Lépero, poniéndose de pie, en lo que le imitaron los demás de la partida : quedamos en que, en igualdad de circunstancias, preferirá usted nuestra candidatura a las otras dos, y en que probablemente la votará usted con toda su gente. ¡Ya, ya! respondió con su muletilla de costumbre el tabernero.

¡Qué calle de los dimonios! dijo la mujer; y viendo que pasaban dos caballeros se acercó á ellos, diciéndole al chico que llevaba de la mano: Muchacho, cojea. El muchacho cojeó, y se acercaron á los caballeros, repitiendo su muletilla.

Su cerebro pueril y la infantilidad de su espíritu hacen que se hallen cohibidas, llenas de cortedad, incapaces de sostener una conversación, ni siquiera de comprenderla cuando los conceptos son un poco sutiles. De ahí que las pobrecitas, a todo cuanto se les dice, respondan maquinalmente con esta insustancial muletilla: «¿Ha visto?» ¡qué cosa! ¿no? ¡Qué cosa! ¿no? ¿ha visto?...»

Porque la muletilla de los regalos de la Reina estaba ya muy gastada y no podía usarse más tiempo sin peligro. Un día D. Francisco volvió de la oficina antes de lo que acostumbraba, y sorprendió a Rosalía en lo más entretenido de su trabajo, funcionando en el Camón, como si este fuera un taller de modista, y asistida de una costurera que había llevado a casa.

Todo aquello, aunque a don Antonio «le estaba mal el decirlo», lo había dicho y repetido cuantas veces hablaba con la viuda de su antiguo principal. Y en cuanto a su muletilla «aunque le estaba mal el decirlo», gozaba el privilegio de poner nerviosa a doña Manuela, que tenía por tonto rematado a su antiguo dependiente.

¡Con otra mujer! dijo ella, repitiendo la frase como una muletilla, a la cual no se saca sentido. Sus miradas vagaban por los dibujos de la colcha. , con otra mujer a quien conoces. El asesino le iba soltando a la víctima las palabras en dosis pequeñas, y la miraba observando el efecto que le causaban.

Su chaleco aparece siempre con los cuatro botones superiores desabrochados; la cadena es de plata, gorda y con muletilla. Sarrió es un epicúreo; pero un epicúreo en rama y sin distingos. Ama las buenas yántigas; es bebedor fino, y cuando alza la copa entorna los ojos y luego contrae los labios y chasca la lengua. Sarrió no se apasiona por nada, no discute, no grita; todo le es indiferente.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando