Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 12 de mayo de 2025
De veinte mil pasaron, naturales, Que murieron á causa del estrago Que hicieron aquestos animales: Que en todo el Ubay dejaron pago De planta, ni maiz, ni sementales, Sin pasar por aquel tan crudo trago. Dejando desta vez tan asolada La tierra, que tardó de ser poblada.
¿Qué ha tomado? ¿El poquito de cocido que le aparté anoche? Hija, no pude pasarlo. Aquí me tienes con media onza de chocolate crudo. Vamos, vamos allá. Lo peor es que hay que encender lumbre. Pero pronto despacho... ¡Ah! también le traigo las medicinas. Eso lo primero. ¿Hiciste todo lo que te mandé? preguntó la señora, en marcha las dos hacia la cocina . ¿Empeñaste mis dos enaguas? ¿Cómo no?
Pues hace frío repuso con su impasibilidad delante de las gentes el padre Aliaga ; el invierno es muy crudo... Y avivaba los tizones de la chimenea. Pero más cruda mi fortuna dijo Montiño. ¿Pues qué desgracia os ha sucedido? dijo el confesor del rey, dejando de ocuparse de los tizones y mirando de hito en hito á Montiño. ¡Oh! ¡si sólo fuese una desgracia! ¡Qué! ¿es más que una desgracia?
Dejando, pues, su tierra y propio asiento, La tierra adentro vino predicando: No queda de indio algun repartimiento, Que no siga su voz y crudo mando. Con este impio pregon y mal descuento La tierra se v
O valiente garzon, mas que sesudo, Cómo estándo avisado, tu mal tomas, Entrando en trance tan horrendo y crudo? En esto las mansisimas palomas Que el carro de la diosa conducian Por el llano del mar, y por las lomas: Por unas y otras partes discurrian, Hasta que con Neptuno se encontraron, Que era lo que buscaban y querian.
Es un milagro que podamos daros estos cuantos panes y estas onzas de chocolate crudo nos dijo D. Paco al ofrecernos aquellos artículos . Los franceses no han dejado nada. ¡Qué horroroso saqueo! Y gracias que quedamos con vida. ¡Ay!, la Sra. Condesa salió a recibirlos con una serenidad que me espantó.
Aprovechando un momento en que Velázquez vino á ofrecerle una caña, le dijo por lo bajo: Pero, vamos á ver, hijo, ¿por qué haces esta locura? ¿Qué te faltaba á ti en Cádiz? ¿No tienes salud? ¿no tienes dinero?... ¿Qué demonio vas buscando en esas tierras donde si no le meriendan á uno los salvajes se lo comen crudo los mosquitos?... Que has tenido algunos disgustillos con las mujeres, ¿y qué? ¿Es razón para que un mozo valiente y noble de too su cuerpo se quite del medio? ¿Dónde hay palmito que se pueda comparar con unas botellas de amontillado, bebidas en compañía de cuatro amigos, y unas aceitunitas aliñás?... Me lo dijo hace tiempo un vista de la aduana que había estado muchos años en Puerto-Rico, un tío muy ilustrado, capaz de beberse el golfo de Méjico: «Desengáñate, Rafael, las mujeres no sirven más que para enfriar el caldo cuando uno está acatarrado y no puede sacar los brazos de la cama».
Sentáos, sentáos, pues, señora; y vos también, padre Aliaga; nadie nos ve; yo entro y salgo, merced á ciertos pasadizos, sin que nadie me vea, y estamos completamente libres de la etiqueta. Todos se sentaron. El rey, que era muy sensible al frío, removió el brasero. ¡Qué invierno tan crudo! dijo ; aseguran que hay miseria en los pueblos; ¡pobres gentes! Y volvió á revolver con delicia el brasero.
Aparte se hace el almíbar, y cuando tenga punto, se mete la naranja, haciéndola hervir a fuego lento hasta que esté a punto, colocándola en tarros, cuidando que quede la fruta cubierta por una buena capa de almíbar. Se necesita kilo y medio de azúcar por kilo de naranja en crudo.
Chocolate crudo... ¡y poco que me gusta el chocolate crudo!... nueces... una cosa envuelta en un papel... ¿qué es? ¡Ah! ¡Madre de Dios!, un dulce.... ¡Dios Divino!, ¡pues a fe que me gusta poco el dulce! ¡Qué rico está! En mi casa no se ven nunca estas comidas ricas, Pablo. Nosotros no gastamos lujo en el comer. Verdad que no lo gastamos tampoco en el vestir. Total, no lo gastamos en nada.
Palabra del Dia
Otros Mirando