Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 14 de julio de 2025
CAJAS DE BIZCOCHO. Para una docena de huevos, una libra de azúcar; se bate mucho y se agrega media taza de harina; después de muy trabajado se llenan con esa pasta las cajitas de papel, que se tendrán preparadas, y se cuecen en horno suave; al sacarlos del horno se les da con una pluma de ave un baño blanco que se habrá hecho con una clara de huevo y cien gramos de azúcar, todo muy batido.
En el extremo de la isla, en las rompientes, las olas simulan que disparan cañonazos. A veces, un dedo invisible toca en los vidrios: algún ave nocturna atraída por la luz, y que se estrella la cabeza contra el cristal.
Marta se ruborizó hasta la raíz de los cabellos, pero yo le tomé la mano a hurtadillas por debajo de la mesa, diciéndome: ¡Ya sabemos lo que nos hace tan felices! Al día siguiente por la mañana, cuando tomábamos nuestro café, papá entró con una carta abierta en la mano. Una ave forastera viene a albergarse en nuestro nido dijo riéndose. ¡Adivinen cómo se llama!
Eponina quiso que esta se los pusiera para ver el efecto. ¡Ave María Purísima!... Púsose el primero; estaba encantadora. Púsose el segundo. ¡Oh, arrebataba! El tercero..., ¡Cristo!, el tercero caía tan bien a su cuerpo y figura, que sólo la idea de tener que quitárselo le daba escalofríos.
Siéntese usted un momento, que le voy a hacer otra pregunta. ¡Ave María Purísima!... ¿con qué caballero? Con aquel que se murió de repente... Cállese, cállese o le pego... No, si yo no lo creo ya. Lo creía; pero como fue la indecente de Aurora quien me lo dijo, ya dejé de creerlo... sólo que tenía un poquito de duda. Aquí donde usted me ve, yo, al lado de ella, soy un ángel.
Muchas veces se cierne el ave de rapiña en regiones aun más altas, pero es para viajar de una á otra pendiente de la montaña ó para vigilar la extensión en lontananza y descubrir una presa.
El ave rastrera se fatiga revoloteando, y recorre mucho terreno, y no sale de la angostura y sinuosidades de los valles: el águila remonta su majestuoso vuelo, posa en la cumbre de los Alpes, y desde allí contempla las montañas, los valles, la corriente de los rios, divisa vastas llanuras pobladas de ciudades, y amenizadas con deliciosas vegas, galanas praderas, ricas y variadas mieses.
El tabon, ave muy digna de estudio por la manera que tiene de incubar sus huevos, enterrándolos, se halla en bastante número en Tayabas.
El rostro de la pobre joven se volvió rojo como la flor del granado, y ocultó su cabeza en el seno de la superiora, indignada de la temeridad del desconocido. ¡Ave María... qué atrevimiento! dijeron las mujeres. ¡Por la Virgen! ¿de dónde sale ese demonio? se preguntaban los hombres, estupefactos de tanta audacia.
Este mismo suceso ha servido para la composición dramática de un desconocido, hecha después de Lope, que, con el título de El triunfo del Ave María, se representa hasta hoy en el teatro español. La tradición en que se fundó La Estrella de Sevilla, se ha conservado hasta hoy en esta ciudad.
Palabra del Dia
Otros Mirando