United States or North Korea ? Vote for the TOP Country of the Week !


La habitación estaba llena de objetos de toda clase, de baúles abiertos y cerrados y aun de muebles derribados. El duque atravesó por todos aquellos obstáculos con precauciones infinitas. Marchaba a tientas, rozando todos los objetos sin tocarlos y paseando entre las sombras sus dedos destrozados. A cada paso murmuraba en voz baja: Honorina, ¿está usted ahí? ¿me oye usted?

La señorita Guichard acababa de encaminarse al saloncillo á fin de dar órdenes, sin duda, para la cena. Juzgó que la ocasión era favorable. Bajó al patio, atravesó los pabellones, subió ligeramente la escalera que conducía á sus nuevas habitaciones; llamó, y como nadie le respondía, entró. En el cuarto, alumbrado por una lámpara, estaba extendido sobre la cama el vestido de novia de Herminia.

¡Dorotea! ¡Dorotea! dijo una voz cerca de ellos. ¡Otra vez á la escena! exclamó la joven ; ¡oh, malditas sean las comedias y mi suerte!... Esperadme, no os vayáis. Y desasiéndose del brazo de Juan Montiño, atravesó rápidamente el espacio comprendido entre los telones, y salió á la escena. Poco después se oyeron fuera estrepitosos aplausos.

Pero no se atrevió a hablarle ni a detenerla, por no turbar el silencio del dormitorio, iluminado por una luz tan débil que le faltaba poco para extinguirse. Mauricia atravesó la estancia sin hacer ruido, como sombra, y se fue.

El y Fernando se saludaron como si la víspera se hubieran visto. El marino se contentó con decir: Estás viejo, hombre.... Andrés le atravesó con sus ojos bizcos, inexpresivos y torpes, y dijo un poco sarcástico: estás más joven. Se volvieron la espalda. Fernando cantaba una barcarola. Andrés buscaba a su madre para pedirle dinero.

Sin embargo, había que resignarse; así es que el pobre Silas, después de haber sondeado bien con la mirada los alrededores de las cercas, atravesó la hierba, creyendo, con su vista corta, distinguir a Eppie tras de cada mata de acedera roja, viéndola continuamente alejarse a medida que se aproximaba. Buscó en vano en la pradera; entonces, salvó el cerco y se encontró en la propiedad vecina.

Cogió la batelera los remos, atravesó la bahía, amarró el bote y desapareció allá entre los árboles. Mientras tornaba con la respuesta, nuestro joven se fue a hacer una visita al capitán del vapor y al piloto de las peteneras.

Su ira por los disgustos domésticos y por aquella fuga que lastimaba su vanidad ansiaba descargarla sobre los toros. Cuando llegó el carruaje, atravesó Gallardo el patio, sin fijarse, como otras veces, en la emoción de las mujeres. Carmen no apareció. ¡Bah, las hembras!... Sólo servían para amargar la vida. En los hombres se encontraban únicamente los afectos durables y la alegre compañía.

Maltrana atravesó el puente de Segovia, entrando después en la carretera de Extremadura. Vestía de luto. El macferlán, la odiada librea de la miseria, ya no pendía de sus hombros. La Suerte le trataba con menos rudeza al verle solo. Trabajaba, le admitían artículos en algunas revistas, le encargaban traducciones, vivía en una casa de huéspedes y ahorraba para pagar a la nodriza de su hijo.

El ridículo cayó sobre las cabezas de los transeúntes; pasó de mano en mano, y fué arrastrado por la multitud do tal modo, que un momento después de caído estaba á gran distancia. Lázaro, que vió esto, bajó rápidamente, llegó á la calle y atravesó, con mucho trabajo, por entre la multitud. Su determinación era decisiva. ¡Qué feliz coincidencial decía para .