Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !
Actualizado: 23 de mayo de 2025
Creo que es porque hoy llega un señor a casa de don Rosendo... y como la carretera atraviesa la romería... Ah, sí, el duque de Tornos... ¿Pero qué tiene que ver?... ¡Vamos, están locos!... Mira, déjame un momento; voy a vestirme, y veré a Maza. Creo que lo arreglaremos. Déjame.
Además, una mudanza tan precipitada sería un trastorno. Yo tengo mi plan, y, con tu permiso, le hemos de llevar a cabo. Enrique sé yo que gusta de la soledad para sus estudios y meditaciones. Permite que vaya a vivir en tu casa. En un momento le arreglaremos allí habitación conveniente. Tu casa está cerca.
Como ejercía una autoridad de procónsul sobre su comarca natal, una de sus primeras disposiciones fué apoderarse de la gran propiedad en la que había trabajado como humilde capataz. El propietario, residente en París, recibió de él una carta dulce y respetuosa: «Venga usted por aquí, patroncito; tendré un verdadero gusto en verle. Arreglaremos cuentas sobre su hacienda.
Ya arreglaremos eso. Y en efecto, hizo llamar al mayordomo y le dijo que aquella tarde era preciso ir á Villoria á ver un castañar que le proponían en venta. Con esto se deshizo por entonces la maquinación seductora de Regalado, quien se fué á la cocina con las orejas gachas.
Seguiré tu consejo, aunque, si he de serte franco, eso de dar á los pobres viene á ser una tontería, porque cuanto les das se lo gastan en aguardiente. Pero ya lo arreglaremos de modo que el dinero de la perla no vaya á parar á las tabernas... Y ahora quiero hablarte de otra cosa.
En cierta ocasión, al presentarse en noche de baile en casa de Alcudia, la marquesa le dijo al saludarla: Muy linda, muy linda, Clementina. Está usted admirablemente vestida.... Pero me parece que la han descotado mucho.... Venga usted conmigo, ya arreglaremos eso.
Tienes razón. ¡Calma, muchacho, calma! A fin de semana estaré en la hacienda; iré a ver al niño, a ese pobre chiquillo que está muy delicado, y entonces, delante de tí, arreglaremos eso. Nada tengo que decirte. Visitaré a tus tías, cuidaré de ellas.... Puedes irte tranquilo. ¡Verás qué bien te va...! ¡Adiós, muchacho; dame un abrazo, y que Dios te bendiga!
Pues es preciso hacerlo. ¿Cuánto vamos ganando? Tanto. Es poco. Pues cuanto. Nos arreglaremos. ¿Quién es el sujeto? Pues es Fulano de Tal. Adelante, empezaremos a trabajar hoy mismo.
Torquemada, echándose el de bondadoso, la hizo sentar á su lado y le puso la mano en el hombro, diciéndole: «Ya lo creo que nos arreglaremos.... Como que con usted se puede entender uno fácilmente; porque usted, Isidorita, no es como esas otras mujeronas que no tienen educación.
Buen pechugón se ha dado... exclamó la Superiora . Ya, ¡cómo estará aquel cuerpo con todo ese líquido ardiente! Nunca nos había pasado otra... La arreglaremos, la arreglaremos. ¿Pero viene o no?». Bajaba ya, decidida a abreviar la tardanza del acto de justicia, cuando se oyó un gran tumulto.
Palabra del Dia
Otros Mirando