Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 19 de mayo de 2025


Los entusiastas dábanle consejos a gritos. ¡Despáchalo pronto! Es un buey que no merece nada. El torero tendió su muleta ante la bestia, y ésta arremetió, pero con paso tardo, escarmentada por el tormento, con una intención manifiesta de aplastar, de herir, como si el martirio hubiese despertado su fiereza. Aquel hombre era el primero que se colocaba ante sus cuernos después del suplicio.

Esto lo sabía todo el mundo, y su esfuerzo guerrero que debía aplastar al militarismo alemán y restablecer la paz en la tierra, aunque bien intencionado, no pasaría de ser un bluff más. Castro aprobaba las palabras del coronel por primera vez, sin ningún intento de burla. El Presidente había declarado la guerra, pero el país no parecía dispuesto á seguirle.

Van apostados. Pues bueno ¡ajajá! Que traigan el Calepino, ese que hay en la biblioteca. ¡Que lo traigan! Un mozo trajo el diccionario. Estas consultas eran frecuentes. Búsquelo usted primero con h dijo Ronzal con voz de trueno a Joaquinito, que había tomado a su cargo, con deleite, la tarea de aplastar al de Pernueces. Don Frutos se bañaba en agua de rosa.

La bandeja escapó de sus manos, y fué tambaleándose como un ebrio, hasta aplastar su abdomen contra la barandilla del puente. «¡Cristo del Grao!...» A Ferragut también se le cayó el vaso que llevaba á su boca, y el oficial francés, sentado en un banco, casi se dobló sobre las rodillas. El timonel tuvo que agarrarse á la rueda con un crispamiento de sorpresa y de terror.

Se lanzó fuera del edificio, en dirección á la ciudad, pero al dar los primeros pasos por la pendiente de la colina vió que se cruzaba en su camino una máquina rodante con cabeza de tigre, ocupada por militares. El Hombre-Montaña levantó su garrote con intención de aplastar al vehículo y los que iban en él. Bastaba para esto un simple golpe dado con la parte gruesa del tronco.

Un ingenioso naturalista lo compara á un gigantesco embudo que absorbiese bruscamente. La ola, escapándose de allí bajo espantosa presión, se eleva á alturas de que no hay otro ejemplo en nuestros mares. La marejada del Noroeste es el motor de la máquina, y si es un tanto más Norte empuja hacia el fondo del golfo, va á aplastar San Juan de Luz.

Al tender la vista por esta distinguida asamblea, observo con júbilo que todos los que la componen han sido dotados también de una buena parte de esta fuerza nativa o acumulada por la herencia. Por ello les felicito con toda mi alma. Lo esencial en este mundo que habitamos es nacer aptos para la lucha. Para no ser aplastados es menester aplastar.

Canterac quiso mostrarse bondadoso y aceptó las excusas del oficinista, dándole unas palmaditas en la espalda. No he podido dormir en toda la noche, querido Moreno. Tengo un proyecto y quiero consultarlo con usted. Necesito aplastar á ese intrigante que se atreve á medirse conmigo... Aquí todos se consideran iguales, como si se hubiesen suprimido en el mundo las jerarquías.

Podía tocarse con la mano, parecía que iba á aplastar con la pesadez de su grueso artesonado, todo cubierto de oro, con florones en sus profundos encuadramientos. El hermano explicaba con cierto orgullo el origen de los cuadros y las telas que adornaban las paredes. Eran regalos de princesas y reinas: testimonios de agradecimiento, de las altas conciencias sometidas á la Compañía.

Si vemos aplastar un hombre en la calle, experimentamos un dolor físico, como si las ruedas hubiesen pasado por encima de nuestro cuerpo; el relato de este suceso leído en un periódico no hace más que rozar nuestra piel. La duquesa no podía estar tranquila ni ser feliz, pero por lo menos escapó a la acción directa del peligro sobre su sistema nervioso.

Palabra del Dia

santificación

Otros Mirando