United States or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !


Para el vagabundo predispuesto á convertirse en salteador, tenía su cuchillo, y también para el puma, león de las altiplanicies desiertas, no más grande que un mastín, pero que el hambre mantiene en perpetua ferocidad, impulsándole á atacar al viajero.

Igualmente les había visitado muchas tardes este canto medieval, evocando en el cerrado dormitorio un recuerdo de excursiones en automóvil por las altiplanicies de Castilla: una visión de llanuras de rastrojo con hilos de agua bordeados de álamos; cubos de fortaleza sosteniéndose erguidos entre montones de ruinas; pueblos de color pardo; torres de iglesia con nidos de cigüeñas en el remate. ¡Adiós! ¡También adiós!

Mientras la atmósfera se mantuviese tranquila no se consideraba en peligro de muerte. El frío huracán, en esta altiplanicie donde es imposible encontrar refugio, resultaba tan temible como la nieve que sepulta. La rarefacción de la atmósfera representaba igualmente una fatiga mortal para los que cruzaban por primera vez las altiplanicies andinas.

Córdoba se alza en la unión del antiguo camino que conducía de Buenos Aires, por el paso más fácil de los Andes, a la excelente bahía de Caldera en Chile, y del sendero que se dirigía al sur de las altiplanicies de Bolivia. Su clima es famoso por lo salubre y delicioso.

El hambre, un hambre que sólo podía sufrir el español, habituado a las sobriedades de su raza, le acompañó en sus exploraciones por las peladas altiplanicies de los Andes y las llanuras pantanosas sin término. Aventurábase en desiertos de los que parecía haber huido toda vida animal.

Fijábase en su color un tanto cobrizo; en el brillo de sus ojos abultados, de córneas húmedas y dulce humildad en las pupilas, ojos semejantes a los de los huanacos de las altiplanicies andinescas; en el negro intenso de sus pelos fuertes y duros, que los años no podían manchar de blanco.

En lo más elevado y fértil del continente es donde se civilizó el hombre trasatlántico primero. En nuestra América sucede lo mismo: en las altiplanicies de México y del Perú, en los valles altos y de buena tierra, fue donde tuvo sus mejores pueblos el indio americano.

El aspecto de la ciudad es análogo al de las colonias europeas en las costas africanas; pesa sobre el espíritu una influencia enervante, agobiadora, y para la menor acción es necesario un esfuerzo poderoso. Desde que he pisado las costas de Colombia, he comprendido la anomalía de haber concentrado la civilización nacional en las altiplanicies andinas, a trescientas leguas del mar.

Arequipa, con una población de 50,000 habitantes y situada en la línea del ferrocarril del Sur a 106 millas de Mollendo, es la segunda ciudad de la república y tiene gran interés para el viajero. Su altura de 7,506 pies le proporciona un clima delicioso y ofrece un saludable lugar de descanso para los que se dirigen a Bolivia O a las altiplanicies.

Pero la ilusión, sirena encantadora, coleaba en el aire junto a estos locos heroicos en sus horas de desfallecimiento. Cuando en las altiplanicies estériles marchaban casi arrastrándose, las entrañas roídas por el hambre y las piernas petrificadas por el frío, la esperanza, como un relámpago, reanimaba su vigor.