Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 21 de junio de 2025


El 26 fue cuando la de Tellería, no pudiendo ya contener la ola de tristeza que se desbordaba en su afligido pecho, la vertió sobre el de su buena amiga, previo este exordio patético que nos ha conservado la historia: «También le mandaré a usted el vestido de muselina con visos violeta... y todos mis encajes de Valenciennes, punto de Alenzon y guipure. ¿Para qué quiero nada ya?

Al vivífico rayo de tu lumbre Se estremeció la inmensa muchedumbre Y el polvo del esclavo sacudió; Allí surgió la dignidad humana En la nacion potente y soberana Que el soplo democrático animó. Allí, genios pujantes, inspirados, Formularon derechos conculcados En solo una palabra: ¡Libertad! Y Dios vertió con generosa mano Perfumes sobre el mundo Americano, Y le dijo: «Naciones, levantad

Por la tarde el doctor tomó en su casa dos frascos, uno de cabida como para treinta gramos, y otro muy pequeño: llenolos ambos de agua clara, y, sin añadir nada al primero y mayor, vertió en el segundo una materia inofensiva, que dio al agua transparente un color amarillo tan brillante, que puesto el vidrio al trasluz, parecía contener oro líquido.

Uno de los más salvajes y pringosos vertió en su oído, al cruzar, una de esas brutalidades que enrojecería súbito el cutis terso de una miss inglesa y le haría llamar al policeman y hasta quizá pedir una indemnización.

Aun recuerdo algo del célebre drama romántico, aquello de doña Sol a Carlos V: «¡Callad, que me avergonzáis...! Don Carlos, entre los dos todo amorío es locura.... Mi padre su sangre pura vertió en la guerra por vos, y yo, que airada os escucho, soy, pese a furor tan loco, para esposa vuestra, poco, para dama vuestra, mucho

De repente, como si lograse desatar un nudo que le apretaba la garganta, como si quebrase un cordel que la ahogaba, rompió Pepita en lastimeros gemidos, vertió un raudal de llanto, y dio con su cuerpo, tan lindo y delicado, sobre las losas frías del pavimento.

No, ya estoy bien. Y levantándose tomó de la estantería un frasco de azahar, vertió con mano temblorosa una cucharada y la tragó. Después se enjugó el rostro cuidadosamente con el pañuelo y volvió á sentarse. Vamos á ver, ¿qué ha sido? le preguntó cariñosamente el joven.

La colocó atónito en el diván, y trayendo de su cuarto de tocador un frasco de lavanda, se lo vertió entero por sienes y pulsos, rompiéndole al mismo tiempo los ojales de la bata, en la prisa con que quería aflojarle el corsé. Ni un momento le ocurrió llamar al ama Engracia; al contrario, murmuraba muy bajito: ¿Lucía..., me oye usted? ¡Lucía.... Lucía..., soy yo, yo no más..., Lucía!

Pronto desaparecieron las nieves; se oyó el canto de la alondra; calentó más el sol y vertió luz más clara; discurrió por el bosque que circundaba el castillo un aura vital y fecunda; se tapizó el suelo de nueva y menuda yerba, y en los sotos y umbrías de las hondonadas, en la margen de los arroyos, comenzaron a brotar florecillas tempranas, despuntando con timidez en los álamos, mimbrones y chopos, más resguardados de los vientos del Norte, las primeras tiernas hojas.

Como quiera que fuese, o ya por dolor de que no cupiera en lo probable tan raro milagro, o ya por fervor religioso que suavizaba sus amargas penas, el P. Enrique vertió dos lágrimas que bajaron con lentitud por sus mejillas descarnadas.

Palabra del Dia

vorsado

Otros Mirando