Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 2 de mayo de 2025


Doña Blanca, que trataba siempre de V. y con el mayor cumplimiento á su señor marido cuando le echaba un sermón ó reprimenda, le habló así mientras Clara iba delante: Mil veces se lo tengo dicho á V., Sr. D. Valentín. Ese hombre, que V. se empeñó en introducir en casa, allá en Lima, es un libertino, impío y grosero.

La mayor, que es la más estirada, levantó las cejas, y mirándome como con lástima, y echando aquella voz tan fina, pero tan fina que parece que se la han hecho las arañas, fue y me dijo, dice: ¿Pero ese señor, no se casa con usted?. Por poco suelto el trapo... Yo le contesté 'puede' y siguió con el sermón.

No, yo he meditado bien, pero ahora tengo fiebre... mi razon vacila... es natural... si he hecho el mal es con el fin de hacer el bien y el fin salva los medios... Lo que haré es no esponerme... Y con el cerebro trastornado acostóse y trató de conciliar el sueño. Plácido, á la mañana siguiente, escuchó sumiso y con la sonrisa en los labios el sermon de su madre.

¿Pero qué ha hecho? exclamó doña Paulita, la santa. Elías contó la aparición del militar en su casa; contó los antecedentes peligrosos de Clara, su deseo de parecer bien, la compra de las flores, las composiciones del vestido, y las tres damas comenzaron á hacer aspavientos. Salomé entonó un sermón, y doña Paulita se hizo cuatro cruces desde la frente al estómago y desde un hombro á otro.

Cuando estuvo en pie dominando el concurso con la sagrada paloma de madera pintada sobre su cabeza, el ruido se fue apagando poco a poco. La muchedumbre, extraordinariamente engrosada, se apiñó otra vez debajo de la tribuna. Había ya muchos hombres que no venían por pura devoción, sino también con el objeto de juzgar el sermón literariamente.

Bien se comprende que con esta formidable ocupación del terreno y táctica exquisita, no se escapa un cristiano, y forzar el túnel no es menos difícil y glorioso que el memorable paso de las Termópilas. Al caer de la noche, si no hay Novena con sermón, Santo Rosario con meditación y plática, o Adoración Nocturna, se retira el ejército, marchándose cada combatiente a su olivo con tardo paso.

Verdad es que tenemos misa mayor, la cual no exige extraordinario madrugar. ¡Qué solemnidad, qué alegría, qué exaltado entusiasmo respira la iglesia! El sermón versa sobre la infancia de Jesús, asunto que no puede ser más bonito; y oyendo las palabras del cura, parece que es el santo quien habla, porque alza el dedo y su boca entreabierta expresa muy al vivo la emisión de la palabra.

Maravilló mucho que doña Rebeca escuchase el severo sermón de su hijo sin tirarse de los pelos ni recitar siquiera un mal refrán, y que, por remate de cuentas, Carmen estrenase en paz sus lindos trajes y saliese a paseo a la Estación, después de la misa mayor del día de los Santos. La miraron aquella mañana en el pueblo como a una desconocida; parecía otra.

Se burlaba de él; se reía a más y mejor de sus conclusiones luteranas, y después rebatía, con mucho acierto, los errores del mozo. ¡Joven! ¡joven! prorrumpía en tono de sermón. Esta Constitución que usted pone por las nubes, no ha sido hecha de acuerdo con las necesidades del país. Hago punto omiso de cuanto hay en ella contra la Religión. Pugna contra nuestras costumbres.

Se la vio en casa de Vegallana y en las Paulinas, en el Vivero y en el Catecismo, en el teatro y en el sermón. Casi todos los días tenían ocasión de hablar con ella, en sus respectivos círculos, el Magistral y don Álvaro, y a veces uno y otro en el mundo y uno y otro en el templo; lugares había en que Ana ignoraba si estaba allí en cuanto mujer devota o en cuanto mujer de sociedad.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando