Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 3 de mayo de 2025


Pues, lisa y llanamente, las lágrimas de sus ojos y la expresión dolorida de su cara infantil; y yo me preguntaba en cuanto salí de mis dudas: «Pero ¿cuándo está más mona esta chica? ¿cuando ríe y gorjea como los pajaritos del monte, sin penas ni cuidados, o cuando siente, como ahora, a falta de dolores propios, la compasión que le inspiran los ajenos?» Y no sabiendo por cuál de estos extremos optar, quedéme con los dos, porque es lo cierto que, riendo o llorando, estaba monísima aquella criatura.

Cuando murió su madre, Ulises quedó indeciso ante el porvenir, no sabiendo si continuar su vida de navegante ó emprender otra completamente nueva.

Y por estas razones, con alguna más que ella conocería, y que bien pueden sospecharse sabiendo su nuevo modo de pensar sobre las vanidades de su mundo, se hallaba la marquesa de Montálvez con su hija, en el rigor de aquel verano, tomando los baños de mar en una de las playas más hermosas, aunque no la más nombrada, de la Península. Se encontraba muy bien allí.

Te engañas. ¡Temor vano! ¿Crees que te hablo en arrogante alarde, que la mente medrosa desmiente con terror? ¿Piensas acaso, que sabiendo que Dios únicamente puede cortar de la existencia el hilo, me rio de tu saña? ¿O que sintiendo robusto el cuerpo, el ánimo tranquilo, desprecio tu impotencia? ¿O que á grave dolencia rendido, busco en el alivio ansiado? Mas... ¡ah!

Paco Gómez tomó la baraja y sacó las tres sotas; pero sabiendo la debilidad de Nuncita y queriendo, según su temperamento, mortificarla un poco, hizo una señal a la que quedaba, y luego la fue manifestando al oído a algunos de los tertulios.

La causa de haber perseguido tan obstinada i cruelmente á los hebreos el rei Sisebuto, segun aseguran buenos autores, fue una carta de Heraclio: emperador que habiéndose dado á la astrologia judiciaria i á querer por medio de artes supersticiosas entender todo lo por venir, llegó á hacerse gran agorero i amigo de pronósticos; i sabiendo por uno de estos que habia de ser destronado i violentamente muerto por gentes circuncidadas, imaginó estorbar su destronamiento i muerte con traer de fuerza ó de grado á la religion cristiana á todos los judíos que vivian en sus tierras; i no solo á estos sino á los demás que vivian derramados por el orbe; empresa para la cual incitó á todos los reyes sus amigos ó aliados.

Pero terminó entre los dos la antigua amistad. Aresti, aislado en las minas, evitaba el bajar á Bilbao, sabiendo que su mujer visitaba con frecuencia la casa de su primo. Cuando Sánchez Morueta abandonó la villa para habitar su hotel de Las Arenas, Aresti fué á verle con más frecuencia. Le interesaba su sobrina Pepita, que acababa de salir del colegio y casi era una mujer.

»Le las gracias por sus atenciones y le prometí responderle el mismo día fijando la fecha de mi partida. »Volví a casa muy preocupado, no sabiendo cómo darle a Magdalena tal noticia.

Amo la vida, porque temo la muerte. Amo el Arte, porque es la expresión más íntima y completa de la vida. Pongo el Arte sobre la Naturaleza, porque la Naturaleza, no sabiendo que de continuo se está muriendo, es una realidad inexpresiva y muerta. El árbol amarillo de otoño ignora que se muere; yo soy quien lo sabe, cuando en un cuadro perpetúo su agonía.

El banderillero, metido entre los cuernos, corrió de espaldas agitando la capa, no sabiendo cómo librarse de esta situación peligrosa, pero satisfecho al ver que alejaba al toro del herido. El público casi olvidó al espada, impresionado por este nuevo incidente.

Palabra del Dia

commiserit

Otros Mirando