Vietnam or Thailand ? Vote for the TOP Country of the Week !

Actualizado: 12 de junio de 2025


Si os las puedo pagar en haceros vengado de algún soberbio que os haya fecho algún agravio, sabed que mi oficio no es otro sino valer a los que poco pueden, y vengar a los que reciben tuertos, y castigar alevosías.

Se hizo un profundo silencio. ¡Sois unos animales bien singulares! exclamó . Sabed, pues, canallas, que estamos a ochocientas millas de tierra; que hemos de contar al menos con quince días de navegación, y que si guardamos los heridos a bordo se beberán toda nuestra agua y nos harán tanto servicio como los remos a un navío de tres puentes.

Nuestro barbero, que a todo estaba presente, como tenía tan bien conocido el humor de don Quijote, quiso esforzar su desatino y llevar adelante la burla para que todos riesen, y dijo, hablando con el otro barbero: -Señor barbero, o quien sois, sabed que yo también soy de vuestro oficio, y tengo más ha de veinte años carta de examen, y conozco muy bien de todos los instrumentos de la barbería, sin que le falte uno; y ni más ni menos fui un tiempo en mi mocedad soldado, y también qué es yelmo, y qué es morrión, y celada de encaje, y otras cosas tocantes a la milicia, digo, a los géneros de armas de los soldados; y digo, salvo mejor parecer, remitiéndome siempre al mejor entendimiento, que esta pieza que está aquí delante y que este buen señor tiene en las manos, no sólo no es bacía de barbero, pero está tan lejos de serlo como está lejos lo blanco de lo negro y la verdad de la mentira; también digo que éste, aunque es yelmo, no es yelmo entero.

NARV. Grande; pero por su honor Y hacer a Arráez amistad Enfreno la voluntad Y doy la rienda al valor. ARDIN. Pues, señor, sabed que tiene Concertado de matalla. NARV. ¡Matalla! Ni osar miralla. ARDIN. Creedme que lo previene. NARV. Y ¿podré yo remedialla? ARDIN. Podrás, viniendo conmigo Esta noche de secreto.

Sans-délai le dije entre socarrón y formal, permitidme que os convide a comer para el día en que llevéis quince meses de estancia en Madrid. ¿Cómo? Dentro de quince meses estáis aquí todavía. ¿Os burláis? No por cierto. ¿No me podré marchar cuando quiera? ¡Cierto que la idea es graciosa! Sabed que no estáis en vuestro país activo y trabajador.

Sabed, señor, que a me llaman el bachiller Sansón Carrasco; soy del mesmo lugar de don Quijote de la Mancha, cuya locura y sandez mueve a que le tengamos lástima todos cuantos le conocemos, y entre los que más se la han tenido he sido yo; y, creyendo que está su salud en su reposo y en que se esté en su tierra y en su casa, di traza para hacerle estar en ella; y así, habrá tres meses que le salí al camino como caballero andante, llamándome el Caballero de los Espejos, con intención de pelear con él y vencerle, sin hacerle daño, poniendo por condición de nuestra pelea que el vencido quedase a discreción del vencedor; y lo que yo pensaba pedirle, porque ya le juzgaba por vencido, era que se volviese a su lugar y que no saliese dél en todo un año, en el cual tiempo podría ser curado; pero la suerte lo ordenó de otra manera, porque él me venció a y me derribó del caballo, y así, no tuvo efecto mi pensamiento: él prosiguió su camino, y yo me volví, vencido, corrido y molido de la caída, que fue además peligrosa; pero no por esto se me quitó el deseo de volver a buscarle y a vencerle, como hoy se ha visto.

Confieso que me he engañado torpemente dijo el padre Aliaga ; es cierto que no había creído llegasen á un extremo criminal los favores de su majestad á ese joven; pero temía que él hubiese interpretado mal algún favor de la reina. Para que acabéis de tranquilizaros, fray Luis, sabed que á quien ese caballero enamoró fué á . Y me enamoró de un modo que... llegó á engañarme, creí que no mentía.

NARV. Yo os agradezco en estremo La voluntad, mi señora; Pero aunque el alma os adora, La ofensa de mi honor temo; Que parece que deshonra Mi opinión y calidad, Que a quien di la libertad Le venga a quitar la honra. ¿Qué dirá vuestro marido, Sino que yo le engañé? Y sabe el cielo que fué No habiéndole conocido. Sabed que soy caballero, Y que quitalle el honor Contradice a mi valor.

13 sabed que el SE

Y si queréis saber quién os manda esto, para quedar con más veras obligado a cumplirlo, sabed que yo soy el valeroso don Quijote de la Mancha, el desfacedor de agravios y sinrazones; y a Dios quedad, y no se os parta de las mientes lo prometido y jurado, so pena de la pena pronunciada. Y, en diciendo esto, picó a su Rocinante, y en breve espacio se apartó dellos.

Palabra del Dia

irrascible

Otros Mirando